Cuando todos comienzan a coleccionar lo que tú coleccionabas

Los billetes locales de la Guerra Civil han despertado mucho interés en los últimos dos o tres años. En los años anteriores se habían publicado algunos libros y catálogos al respecto que sirvieron como base de estudio a los nuevos coleccionistas. Pero creo que ha sido la espectacular colección Martí Cot la que ha conseguido que muchos redescubrieran los billetes y vales de la Guerra Civil.

Hace cuatro o cinco años los billetes de la Guerra Civil se coleccionaban prácticamente solo en Cataluña. En el resto de España ni se conocían, ni se entendían, ni se valoraban. Cuando salía algún ejemplar de un pueblo malagueño se vendía en el mercado local por tres pesetas; al fin y al cabo, pocos eran los que sabían que ese ejemplar era raro. Y en Cataluña tampoco atraían grandes capitales. Se entendía como una serie amplia y barata, propia de un mercado local, donde cualquier coleccionista con más dinero que paciencia podía hacerse con verdaderas rarezas o incluso ejemplares únicos.

Beget. 1 peseta.
Beget. 1 peseta.

De repente se publicó la Martí Cot y los coleccionistas apasionados de la Guerra Civil encontraron una oportunidad única de hacerse con ejemplares verdaderamente raros (algunos con una cartera bastante frondosa). También hubo decenas de coleccionistas que se dieron cuenta de lo amplia, bonita y variada que puede ser una colección de billetes de la Guerra Civil Española y comenzaron a coleccionar esa serie. Finalmente, no faltó quien descubrió que había billetes locales emitidos por su pueblo o por los municipios de su provincia, convirtiéndose en deseosos de coleccionar los “papelitos de su patria chica”.

El resultado de todo esto fue un enorme incremento en el interés de los billetes de la Guerra Civil. Esto se ve reflejado en los espectaculares remates de la Martí Cot (que sirven como precios de referencia para muchos coleccionistas) y de subastas sucesivas, como la que subastó Soler & Llach hace unas semanas

Ahora viene la pregunta: ¿este repentino interés beneficia o perjudica a los coleccionistas de billetes de la Guerra Civil? 

Esto lo estuvimos debatiendo en el Club Escudo y salieron reflexiones bastante interesantes. Una reflexiones que, obviamente, serán semejantes si ocurre un incremento del interés sobre cualquier otra serie.

Hay que hacer suposiciones

De entrada, está el supuesto de que el interés se mantenga en el tiempo. Nadie tenemos una bola de cristal, así que es imposible saber si los coleccionistas seguirán durante décadas interesados en los billetes de la Guerra Civil o si solo es una fiebre pasajera de la que no quedará más que un vago recuerdo dentro de unos años.

Este asunto es importante para los coleccionistas. Los que consideran que dentro de no muchos años habrá pasado la moda y decaerá el interés, es muy probable que ahora se abstengan de comprar billetes; creen que encontrarán las rarezas que les faltan (u otras semejantes) por menos dinero dentro de unos años. En cambio, los que consideran que el interés se mantendrá, seguirán comprando billetes para su colección; creen que los precios, aunque ya hayan subido, seguirán subiendo.

Molà. Sindicat Agrícola Cooperatiu. 50 céntimos.
Molà. Sindicat Agrícola Cooperatiu. 50 céntimos.

Mi intuición me dice que en España seguirá habiendo bastante interés por estos billetes.Es una serie amplísima, variada y muy interesante desde el punto de vista histórico. En mi opinión es, de lejos, lo más divertido de la notafilia española. Además, conozco a algunas “manos fuertes” con sincero interés por los billetes de la Guerra Civil. Un interés que no se les pasará de la noche a la mañana y que seguramente sujete los precios durante bastantes años. 

Así que ya vemos un primer problema al que se enfrentan los coleccionistas: tener que especular sobre si el aumento de precios es temporal o no. Mi opinión es que no será temporal, pero el futuro es incierto.

En lo que sigue, daré por supuesto que los precios se mantienen o siguen subiendo.

Ventajas del auge de interés

Los coleccionistas que llevan años adquiriendo ejemplares de la Guerra Civil se ven beneficiados del repentino interés por esta serie. El beneficio más obvio es que su colección se ha revalorizado de la noche a la mañana. Sin duda ganarán un buen dinero en el caso de que decidan venderla. 

Otra ventaja es que esa colección se vuelve más líquida. Hasta no hace mucho, solo los coleccionistas valientes se interesaban por estos billetes; eran coleccionistas expertos que sabían bien lo que compraban. Tampoco estaban muy dispuestos a soltar demasiado dinero por las rarezas, sabedores de que llegado el momento les costaría venderlas (esto es especialmente cierto para los billetes de fuera de Cataluña). En la actualidad es facilísimo encontrar comerciantes, o incluso coleccionistas, que estarán encantados de comprar una buena colección de billetes de la Guerra Civil y pagarla como es debido. Ellos saben que esos billetes tendrán una salida fácil.

Peñíscola. 1 peseta.
Peñíscola. 1 peseta.

Esa liquidez tranquilizará a muchos coleccionistas a la hora de comprar nuevos ejemplares. No es lo mismo dedicar 600 euros en comprar un billete de difícil salida, cuyo precio quizá haya que derrumbar el día que se quiera vender, que dedicar esos mismos 600 euros en un billete que, en el peor de los casos, se vendería en 500 euros. 

Del mismo modo, hay comerciantes que se han encontrado con una cartera de clientes interesados en los billetes de la Guerra Civil. Esto les fuerza a estudiar la serie y aprender sus características históricas y de mercado. Esos mismos comerciantes serán quienes eduquen a los nuevos coleccionistas sobre estas series. También se preocuparán en encontrar ejemplares raros y notificar a los coleccionistas más avezados. 

En definitiva, el mercado se vuelve más dinámico para todos. Es más sencillo adentrarse en él para quien comienza y hay más movimiento de ejemplares, lo que puede ser aprovechado por quienes son expertos.

Desventajas del auge de interés

La desventaja más obvia para los coleccionistas es que, al aumentar el interés de esta serie aumenta el capital que entra en ella y, por tanto, los precios suben. No hay otra: ahora los billetes de la Guerra Civil son más caros que hace unos años.

Esto hace que muchos coleccionistas se tengan que replantear su estrategia de compras. Quizá antes podían hacer cuatro compras al mes y ahora se tienen que conformar con solo dos compras; o mantener las cuatro compras pero dedicando más dinero. Hay coleccionistas que lo llevan bien y otros a quienes les frustra. Simplemente tienen que adaptarse: o hacer menos compras o dedicar más dinero

También deben actualizar sus precios de referencia. No pueden estancarse diciendo que tal billete no vale más de 50 euros por mucho que el mercado ahora diga que vale 200. El mercado es el que manda y mucho me temo que si hay coleccionistas deseosos de pagar 200 euros por tal billete, ése será su precio por mucho que hace solo cuatro años costase la cuarta parte.

Santorens. 1 peseta.
Santorens. 1 peseta.

Finalmente, como el mercado se vuelve más grande, la información fluye mejor y se tiende a un mercado más eficiente. Esto, traducido a la numismática, significa que es mucho más complicado encontrar chollos. Ya no es posible hacerse con una colección de billetes de la Guerra Civil a precio de derrumbe (ignoro si alguna vez fue posible) porque no se va a dar el caso de que nadie quiera adquirir esa colección. Muchos serán quienes estén interesados y eso es algo que el propietario sabe más que de sobra.

En definitiva

Cuando se incrementa el interés por una serie, los coleccionistas que estaban centrados en ella suelen enfadarse porque ven cómo suben los precios. Una reflexión más pausada les hace comprender que esa misma subida de precios revaloriza aquellos ejemplares con los que ellos ya se hicieron. 

Pero hay más: si los nuevos coleccionistas vienen para quedarse, esto fomentará que los comerciantes estudien con detalle esta serie y que el mercado se vuelva más dinámico. Ese dinamismo hará que aparezcan nuevas publicaciones, que haya más comerciantes experimentados y que se ofrezcan más ejemplares a la venta. Claro está que también hará más difícil encontrar cholletes.

Comentarios en: Cuando todos comienzan a coleccionar lo que tú coleccionabas

  1. «Finalmente, como el mercado se vuelve más grande, la información fluye mejor y se tiende a un mercado más eficiente. Esto, traducido a la numismática, significa que es mucho más complicado encontrar chollos.» Amen.
    «Otra ventaja es que esa colección se vuelve más líquida.» Amen
    Etc. etc. Son propiedades que ves en otras partes. Y no significa que las cosas están perdidas. Todo sube, baja, vuelve a (re)descubrirse, etc. Lo importante es centrarse en lo que te guste (siempre estará el dividendo llamado «placer»).
    Adolfo, si alguna vez puedes, acércate con tu pareja o amigos a Beget. Luego vuelve a mirar el billete y dime lo que sientes.

  2. Tu pareja te insinuará que el pueblo «ese» era maravilloso. Luego puedes aprovechar para explicarle que emitió unos billetes muy bonitos también. Ojo, no soy notafílico, pero comprendo bien a los del ramo.

  3. Juan Manuel González Rey

    Y también hay que tener mucho cuidado, pues esto hace que surjan más falsificaciones. Daros cuenta que este tipo de billetes son muchísimo más fáciles de replicar pues no tienen medidas de seguridad. Saludos.

    1. Adolfo Ruiz Calleja

      ¡Muy cierto! ¡Esta dimensión no la había contemplado!

      También es verdad que, igual que aparecerán nuevas falsificaciones, aparecerán catálogos y otras publicaciones que permitirán determinar las auténticas. El momento más peligroso siempre es cuando empiezan a aparecer las falsificaciones y el mercado numismático todavía no está acostumbrado a ellas.

      1. Estoy de acuerdo también. Tecnología (parece una tontería, pero una imagen de alta resolución puede ayudar mucho) y trazabilidad (ahora que empiezan a conformarse y subastarse grandes colecciones, se pueden «marcar» muchos ejemplares con una etiqueta de «pedigree», como hacen a veces los estadounidenses, permitiendo también identificar a nuevos hermanos) quizás ayuden muchísimo. Y conocimiento (cada vez mayor número de referencias y fuentes para consultar), mucho conocimiento y cautela, también! Campo abonado para los que les pueda la «pasión documental» y les guste entrenar la paciencia y saborear sus frutos.

        Peligro y oportunidad, riesgo y rentabilidad, Adolfo. Al final, todos los coleccionistas, con sus acciones (pongo solo aquí los dos casos en cada extremo: unos de manera consciente al orientar un valor hacia un objeto a modo de reserva, sean acertadas sus expectativas o no, y otros de manera inconsciente porque solamente les interesa la vertiente numismática), están conformando un mercado:
        – Si compras un ejemplar en una subasta, contrastado y reconocido por miles de ojos, estarás sujeto a las reglas del mercado más o menos eficiente, con sus mejores días, y también sus «peores» (¡día de oportunidad para ti!). Pero la rentabilidad que esperes no será tan alta (diferencia entre precio de compra y precio «que esperas»), sin contar «riesgos» generales que afecten a todo el mismo, claro. En cualquier caso, quizás lo que busques no sea tanto esa rentabilidad, sino un disfrute y admiración por lo que tienes delante.
        – Si lo compras en un mercadillo a un precio inferior, empieza el juego del peligro-oportunidad. El peligro o riesgo (ej. «fake», que sea difícil el reconocimiento de tu ejemplar, o sí!, etc etc.) es más alto, pero la rentabilidad en caso de sonar la flauta también.

  4. Adolfo Ruiz Calleja

    En el grupo de Facebook «La Taberna de la Numismática y la Notafilia» están comentando esta entrada. Os dejo los comentarios más relevantes:

    Pepe Botella:

    “También deben actualizar sus precios de referencia. No pueden estancarse diciendo que tal billete no vale más de 50 euros por mucho que el mercado ahora diga que vale 200. El mercado es el que manda y mucho me temo que si hay coleccionistas deseosos de pagar 200 euros por tal billete, ése será su precio por mucho que hace solo cuatro años costase la cuarta parte”.
    Pequeño extracto escrito por Adolfo en esta entrada del blog.
    Leer y comentar porque es muy interesante!

    Ramón García:

    Como siempre hablo con humilde opinión, con respecto a eso te diré que cuando acabó la guerra en la mayoría de las casas o al menos en la parte perdedora en el que es de mi familia mi abuela que se quedó viuda tenía un montón de billetes y los miró 1 × 1 y no era ni uno bueno, no le valió ni uno esto es billete supongo que alguien pues los debía guardar y con el tiempo pues alguien pues nos empezó a poner de moda como toda la vida entonces es la ley de la oferta y de la demanda eso es fundamental en los subida de precio o bajada de precios también están las mudas como en todo hay épocas que se lleva una cosa y hay épocas que se llevan otra, y después está el punto tres, la gente con visión de hacer negocio que siempre saben utilizar unas técnicas para que mucha gente conozca ese producto y se pique y entonces pues vuelvo a repetir contra más demanda mayor precio. Esto es así en toda la vida no son los billetes en la moneda por lo tanto a veces hay que aprovechar A comprar lo que no está de moda porque como todo volverá ahora hablas y a veces está de moda la moneda mexicana después está de moda la moneda de tal país después está de moda los ocho reales porque te dicen que los americanos están interesados E.T.C. E.T.C. vuelvo a repetir dos cosas fundamentales mejor dicho tres y la especulación la gente que sabe dirigir las cosas. La moda como todo a veces se llevan las cosas y otras veces se dejan de llevar y a mayor demanda la oferta pues ya sabes lo que es eso es mi punto de vista por eso muchas veces cuando vas con una idea de comprar Y ves una moneda que está muy bien hay que aprovechar porque la que vas a buscar tu igual pagas el busto y las ganas y en ese momento te aparece una moneda muy buena que si no lo aprovechas ahora igual otra vez que paso a buscarla ya lo encuentras mucho más cara por eso hay que aprovechar eso es mi humilde opinión. Saludos.

    Mijail Hurtado:

    Obviamente nos perjudica porque incrementan los precios. Sin embargo, es parte del “juego” siempre sucederá y la numismatica ahora está siendo vista como inversión.
    Me ha sucedido a mi que he recibido ofertas ridículas por algunas de mis monedas pero al final pude venderlas por el precio justo.

    Natxo Locales:

    Buenísima entrada Adolfo, te felicito 👏👏👏👏👏👏👏👏👏👏👏 porque me afecta y me siento muy reflejado en ella.

    Francisco Sánchez:

    Contra más estemos más reiremos , es bueno porque también venderás sus billetes repetidos

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