“Compra el libro antes que la moneda” es una frase que pocos se atreven a negar aunque son pocos los que cumplen ese principio. Los coleccionistas numismáticos gastan muy poco en libros. A la vez, la drástica reducción del coste de autoeditar un libro e imprimir unos centenares de ejemplares hace que cada vez haya más autores que se animen a publicar el suyo. Parece que ambas tendencias no cuadran, pero es la realidad: cada vez se publican más libros y cada vez se compran menos. Esto es una tendencia general en lo que a libros se refiere (uno y dos), pero creo que no está de más reflexionar al respecto como numismáticos.
Por qué cada vez se compran menos libros numismáticos
Pocos coleccionistas tienen una biblioteca extensa. Los que la tienen suelen considerarse a sí mismos coleccionistas de bibliografía numismática (es decir, no solo coleccionan monedas sino también libros sobre monedas). La mayoría se hacen con un par de catálogos básicos y el resto de información lo encuentran en la Web; incluso ahora que el catálogo de Áureo & Calicó es gratuito en pdf, quizá incluso los generalistas se los ahorren.

Así es para la mayoría: si coleccionan algo especializado, se hacen con dos o tres libros al respecto; si no, con un catálogo básico lo tienen hecho. Para todo lo demás, la Web. Tampoco es que me parezca mal.
Muchos coleccionistas encuentran en los libros un gasto que se pueden ahorrar; los 40-80 euros que cuesta cada libro lo prefieren dedicar a adquirir una moneda a mayores para su colección. Entre los libros destacan los catálogos. Si son libros que describen la historia numismática de un periodo determinado, la realidad es que a pocos coleccionistas les gusta estudiar los detalles de tal o cuál emisión, su legislación y sus implicaciones económicas. La mayoría de los coleccionistas se conforman con una comprensión bastante superficial de sus monedas (¡normal!) y para ello no les hace falta adquirir libros especializados. Más todavía cuando en la Web hay una cantidad ingente de bibliografía especializada accesible gratuitamente a golpe de click.
Luego están los problemas intrínsecos de los libros físicos: son voluminosos, pesados y de difícil acceso. Yo tengo bastantes libros en mi casa que incluyen una información muy útil para poder escribir esta bitácora. Lamentablemente, cuando viajo (¡y viajo mucho!) no puedo acceder a ella.
Yo prefiero los libros digitales. Tanto es así que el de Áureo & Calicó lo tengo en mi PC y en la estantería; creo que desde que tengo ambos formatos nunca más he vuelto a abrir el libro físico aunque lo tenga delante. El motivo es que en un libro digital puedo ir directamente a la página tal o cual, además de contar con un motor de búsqueda que me posiciona cierta palabra de manera inmediata. Para mí la cosa está clara: los libros digitales tienen infinidad de ventajas con respecto a los libros físicos. Yo pagaría más por la edición digital de un libro que por su edición en papel, pero me consta que no hay muchos coleccionistas que piensen como yo.
La mayoría de los coleccionistas, puestos a elegir, prefieren libros físicos. En el libro físico encuentran el romanticismo de ir pasando páginas e ir viendo las ilustraciones. Además, al comprar un libro físico el comprador percibe la adquisición de un bien tangible, una percepción que se diluye cuando se trata de un libro digital (especialmente para quienes pasan de los 40). Finalmente, está la sospecha de que ese libro pueda ser codiciado en un futuro y sea un objeto de colección en sí mismo, tal y como pasa con el libro de Próctor sobre la ceca de Panamá.

La logística de los libros físicos es otro problema oculto. Muy pocos comerciantes están dispuestos a hacerse cargo de objetos voluminosos, pesados, que cuesta muchísimo venderlos y que, además, les dejan poco margen. Solo los comerciantes más valientes y aquellos que buscan una clientela muy bien formada (como La Dobla) son los que se preocupan por vender libros. Vendedores así hay muy pocos; casi ninguno asesora a sus clientes sobre la bibliografía básica a utilizar. Así que la falta de interés por parte de los coleccionistas se traslada a los comerciantes; o quizá sea al revés, no lo sé.
Por qué cada vez se escriben más libros numismáticos
Es paradójico que, a pesar de lo anterior, ahora se escriban más libros de numismática. Yo creo que hay fundamentalmente dos motivos que lo explican:
El primer motivo es que el acceso a la información necesario para hacer un catálogo numismático es mucho más sencillo ahora que antes. Las bases de datos públicas que se encuentran en la Web permiten acceder al histórico de miles de subastas. Esos son centenares de miles de monedas, con buenas fotografías, al acceso de cualquier autor. Si ese autor tiene buena relación con las casas de subastas no será complicado que le permitan utilizar esas imágenes en su publicación.

El segundo motivo es que el coste de publicación se ha reducido mucho con respecto a unas décadas atrás. Hoy en día auto-editarse un libro no es algo descabellado para un trabajador medio que tenga unos ahorros. Por unos pocos miles de euros se puede hacer una edición de algunos cientos de ejemplares. Una cantidad tal que el mercado numismático casi nunca es capaz de absorber. Es curioso que en Hispanoamérica esos costes de edición sean mucho más altos, lo que retrae a muchísimos autores de escribir un libro.
En realidad: por qué no se compran más libros
La verdad incómoda es que los coleccionistas no compran libros porque lo que más les interesa es cómo adquirir monedas más baratas o cómo venderlas más caras. Esa información no está en los libros ni tampoco se consigue estudiando el transfondo histórico de cada pieza.
Es más que conocido que estamos dispuestos a gastar dinero en algo si creemos que ese algo nos permitirá ganar más dinero del gastado. Con los libros y catálogos numismáticos no es el caso. Por eso se venden mal: es difícil que la gente pague solo por cultura.
También por eso mismo los catálogos que incluyen precios de las monedas que listan se venden mejor. Todos sabemos que esos precios no valen para nada (o casi nada), pero dan la ilusión al comprador de conocer el precio de mercado solo con tener un catálogo. Esto es algo que muchos autores admiten: “ya sé que es absurdo colocar precios, pero los incluyo porque si no el catálogo no se vende”.

En realidad: por qué se escriben libros
Hay otra verdad incómoda de por qué se publican más libros de numismática: porque escribir y publicar un libro incrementa el ego del autor.
Pocos son los que lo admiten, pero estoy seguro de que el ego personal está detrás de muchos libros publicados. A todos nos gusta que nos consideren (o, al menos, considerarnos) los autores de referencia de tal o cual serie. Por eso son muchos los autores que, simplemente, dan una estructura más o menos coherente a los apuntes que ellos han estado recopilando durante muchos años y ya con eso tienen su libro. Otros no hacen ni eso y se encuentran con libros cuya contribución es mínima.
Ese ego del autor muchas veces se ve reflejado en la edición: un tomo voluminoso de papel grueso, fotos grandes, tapa dura… Una edición que el autor quiere para sí mismo pero que cuesta 100 euros al coleccionista que quiera comprarlo (en Hispanoamérica he visto libros por encima de los 500 euros).
El autor considera que esos 100 euros estarán bien empleados porque el lector obtendrá el conocimiento que él ha recopilado durante décadas. Es cierto, pero ¿cuántos coleccionistas estarán dispuestos a dedicar tanto dinero a ese libro? ¿no sería mejor proporcionar el mismo contenido en la cuarta parte de espacio y ofrecerlo por 30 euros?
Lamentablemente muchos autores no se preguntan cómo hacer para que su libro llegue a más gente, a pesar de que no tienen un interés crematístico cuando lo publican. Muchos lo que se preguntan es cómo hacer el libro magnánimo y ser ellos los autores.
Que nadie me malinterprete. No estoy diciendo con esto que el ego personal sea una mala motivación; de hecho, la auto-percepción del autor es una buenísima fuente de motivación para realizar cualquier empresa. El problema es que se genera una tensión entre el autor, que quiere sentirse padre de una obra importante, y los coleccionistas, a quienes les cuesta muchísimo rascarse el bolsillo.

Buenos días, Adolfo:
Muy interesante artículo. Yo siempre he pensado que para coleccionar primero hay que tener información sobre lo que se colecciona y sobre la historia que lo envuelve.
Como bien dices, se venden menos libros porque en internet se encuentra casi de todo y por el tema del espacio también. Hace poco me ofrecieron los más de 100 tomos de la enciclopedia Espasa-Calpé por 300 €, un regalo, pero no la adquirí. A ver donde se mete eso en un piso hoy día.
Otro aspecto que creo hace que cada vez se publiquen más libros, aparte del ego personal, creo que es que el escritor disfruta con su publicación. El esfuerzo que ella conlleva le hará implicarse más en el tema sobre el que quiere escribir.
Un saludo
Pues resulta que soy un “rara avis”, atesoro no pocos catálogos físicos y la mayoría son en otros idiomas (alemán, inglés, italiano y francés).
Buenos días Adolfo, saludos desde Argentina: Muy interesante artículo. También en algunos países, el acceso a material de importación o el cambio a moneda extranjera y la creciente inflación, limitan (aunque no lo hacen imposible) el acceso a bibliografía. Si es coleccionista de moneda nacional, se encuentra con nuevas ofertas de material, de bibliografía disponible. Ahora si uno hace algún otro país , la situación cambia.
Como todo artículo del blog, lo compartí gustoso para re leerlo desde una pantalla de mayor tamaño. Abrazo desde aquí y por más publicaciones
@Joaquín, por ahí tienen mis padres la enciclopedia Espasa también. Lleva ocupando una estantería y media desde que yo era niño y no recuerdo a nadie haber abierto un solo tomo desde hace más de 20 años.
@DRINFEAL, no estás solo. Yo también tengo una buena cantidad de libros (ya visteis los que adquirí el año pasado: https://youtu.be/-sR58cS6__k ). Pero somos los menos, hay una buena cantidad de coleccionistas que pasan de comprar libros. Como dije antes, no les juzgo.
@Juan Carlos, me imagino que la inflación argentina os dificulte adquirir cualquier tipo de bien, ya sean libros, monedas o cualquier otra cosa. Quien no gane en dólares debe de estar fastidiado.
Dices, Adolfo: «La mayoría de los coleccionistas se conforman con una comprensión bastante superficial de sus monedas (¡normal!) y para ello no les hace falta adquirir libros especializados». Ese «(¡normal!)» hace que no esté de acuerdo con la frase. ¿La literatura numismática debería ser más barata? Sí, estoy de acuerdo. Como autor y, digamos, «impulsor» de publicaciones numismáticas, me gustaría que lo fuera y busco rebajar el coste para que mi obra (y los de los demás, si está en mi mano) sea lo más asequible posible. Pero de ahí a considerar que sea «normal» que la mayoría de los coleccionistas se conformen con tener un conocimiento superficial de su colección, hay mucha diferencia. Una vez tuve una experiencia con un coleccionista avanzado: me decía «tengo esta moneda, y esta otra, y aquella otra…», todas buenas monedas. En cuanto le dije «pues mira, este libro habla de una de ellas», un libro que costaba 20 euros y que era toda una novedad en aquel momento, no le hizo ni el más mínimo caso. No veo normal que uno se gaste centenares o miles de euros en monedas (o en viajes, o en un coche…), pero nada o casi nada de vez en cuando en ampliar su conocimiento sobre lo que tiene.
Yo tengo una biblioteca numismática que considero extensa, pero no me considero coleccionista de libros de numismática porque soy bastante selecto y sólo quiero que lo que me interesa de verdad ocupe sitio en mi limitado espacio, aunque siempre caen libros casi por accidente que acabo conservando. Simplemente considero que adquirir libros para conocer mejor lo que uno colecciona debería ser parte intrínseca de la afición. Pero cuando hablo de libros, me refiero a los estudios más profundos que los meros catálogos. Mientras que éstos, con lo que hay en internet, tenderán a desaparecer en un futuro en su formato de papel, los estudios que explican la historia que se esconde detrás de ciertas monedas no lo harán o tardarán mucho más en hacerlo, se seguirán publicando en papel y son los que enriquecen realmente el conocimiento de lo que uno tiene entre manos.
De la misma manera, creo que no se debería considerar «normal» que, por ejemplo, muchos numismáticos no se hagan miembros de sociedades numismáticas porque prefieren ahorrarse la cuota para gastársela en monedas, cuando su pertenencia a ellas aporta muchos otros beneficios en forma de conocimiento, de contactos y de experiencia (que, a veces, favorece el acceso a monedas). Además, ¿cuántas monedas de calidad puede uno comprar con lo que cuesta una cuota, que generalmente no llega a los 100 euros?
Dices que detrás de cada libro hay (casi) siempre el ego de su autor. En mi caso, lo que más me mueve a la investigación numismática es hacer contribuciones a esta ciencia que me apasiona y descubrir los secretos que se esconden detrás de esos objetos (casi siempre) metálicos que siempre me han fascinado. Eso sí, intento hacer contribuciones serias y no decir muchas estupideces, y para ello procuro leer toda la bibliografía que existe sobre el tema y consultar con investigadores más expertos que yo para asegurarme de no meter mucho la pata. También leo lo que escribo dos o tres veces antes de publicarlo. Creo que algunos de los que escriben «obras» actualmente, ni leen, ni consultan con expertos ni la bibliografía que debieran, ni escuchan, ni citan sus fuentes, ni releen lo que escriben, ni saben escribir bien y sin hacer faltas de ortografía. En definitiva, escriben pero no son honestos. Esos sí que escriben para alimentar su ego y poco más. Si se escribe desde el rigor y la seriedad, citando adecuadamente, enmendándose a uno mismo cuando sea necesario y consultando la bibliografía que existe sobre el tema y con gente más experta, a la que se agradece la ayuda públicamente, el acto de escribir se hace con el ego mucho más controlado (al fin y al cabo, todos tenemos nuestro ego) pero de forma más honesta y humilde. Además ¿cuán riguroso será un autor si no posee una mínima bibliografía numismática? Si se conforma con lo que encuentra en internet, va por el mal camino, creo yo.
En fin, es sólo una opinión más.
Jaume mejor no se podía haber dicho. Bravísimo, ni le falta ni le sobra una coma. Gracias por escribir así de bien en nombre de todos los que investigamos y no copia-pegamos …. Un saludo J.M.
Gracias por el magnífico comentario, Jaume. Eran comentarios como éste los que buscaba con el texto que escribí, deliberadamente incisivo.
Solo apunto una cosa: la mayoría de los coleccionistas dedican 2-3 horas (o menos) a su colección cada semana. Tienen muchas obligaciones como para ponerse a profundizar.
Saludos,
Adolfo
MUY DE ACUERDO
Pues, por dar una idea, un libro que me compraría sería con las entradas del blog numismático. Porque al final de un libro lo que quiero es información didáctica y a la vez entretenimiento. Para catálogo con el Calicó ya se cubre el mínimo.
Jejejeje
Alguna vez me han animado a escribir algún libro. Podría hacer la versión extendida del libro que regalo al suscribirse en la lista de correo. También tengo otras ideas… pero con todo el contenido que genero para el Blog no me quedan muchas fuerzas para ponerme a escribir un libro.
Saludos,
Adolfo
Buenas tardes a todos, llevo coleccionando monedas hace mucho tiempo, por lo menos 26 años, he tenido muchos catálogos, pero con el paso del tiempo y el desarrollo de la tecnología y la publicación de los remates de las subastas, los catálogos q antes veía con buenos ojos, ahora los veo desfasados en poco tiempo. En los últimos tiempos, me ha sorprendido q coleccionistas publicaran libros para coleccionistas, como ha pasado hace poco con un libro sobre onzas, hoy más q agotado. Del cual yo me deleito, más q muchos insulsos libros q solo recogen fechas y precios fosilizados. Pienso q igual q se ha realizado un libro sobre la onza por coleccionistas, podrían hacerse sobre mas tipos de monedas, 8 reales , 16 maravedis felipe IV, cobres de los Borbones ect Donde en dichos libros se expliquen cosas sobre la serie en concreto y peculiaridades.. en fin algo más q enumerar precios y años .. y q sean amenos y entretenidos
Es el libro de Los escudos de a 8 ? Hermoso libro, cada tanto lo abro y disfruto de todas las fotos, las caracteristicas de las onzas, las conservaciones, etc.
Saludos desde Argentina.
Si correcto. Es una pasada
Respetando, que no compartiendo, todas las opiniones expuestas en esta apasionante entrada, me atrevo a exponer mi propia experiencia como autor y como coleccionista.
Como coleccionista estoy inmensamente agradecido a quienes me han enseñado y me siguen enseñando con sus publicaciones. Impagable su esfuerzo y su tiempo. Dicen los psicólogos que es fundamental conocer para tomar decisiones acertadas.
Como autor, mi mayor motivación es compartir con otros coleccionistas los conocimientos que he ido adquiriendo en horas de estudio y de conversaciones con expertos en la materia.
Cordiales saludos.- Juan Bautista Bajo Miguélez
Muchas gracias, Juan Bautista!!
Pues, en mi caso, llevo publicados unos diez u 11 libros con la facilidad, antes comentada por Adolfo, de la autoedición. Yo no lo hago por ego sino porque me permite al escribir dicho libro estudiar el tema del que tratará con lo que voy aprendiendo a la par que lo escribo como recordatorio y para poner a disposición de los demás interesados. Al mismo tiempo consigo un catálogo «a mi gusto» con las mejores imágenes posibles y además editando las mismas y añadiendo otros detalles que considero hacen mas atractivas esas «fichas» o páginas de las que se compone el libro y/o catálogo. De las 10 u 11 publicaciones que tengo publicadas y los ejemplares vendidos habré obtenido una cantidad irrisoria que no daría ni para comprar una decente moneda pero me basta con disponer de esos ejemplares en mi biblioteca personal y que, en muchos lugares del mundo me consideren el máximo entendido en un tema concreto (en este caso hablo de militaria y de una condecoración en concreto) y me hagan consultas personales que, a buen gusto respondo sin problema para ayudar al coleccionista novato en lo que pueda. En mis tiempos no había nada de literatura en español sobre la militaria y ahora al menos he hecho parte de contribución para los nuevos coleccionistas. En cuanto a la numismática he publicado 5 libros/catálogo de momento. Con estos libros he conseguido adquirir el conocimiento necesario sobre las monedas que me gustan y colecciono, compartirlo con los demás y tener libros sobre ello para disfrutar, consultar y releer cuando no tenga otra cosa que hacer o me pique el gusanillo de nuevo de algunas monedas en concreto. Algunos lo llamaran ego, para mi es mejorar lo existente a mi gusto personal. Hace poco compré un librito en amazon de otro autor sobre los ensayadores y al contemplar la pésima calidad de sus gráficos, imágenes de monedas en blanco y negro sin distinción de detalles y donde costaba hasta ver las marcas de los Ensayadores quedé muy defraudado y pensé en escribir yo alguno de mis libros «en condiciones» sobre el tema numismática y otra cosa no pero quien ha comprado mis libros o ha recibido de mi parte un ejemplar gratuito no se puede quejar de calidad en las imágenes y disposición atractiva y comprensible. ¿Vender?…prácticamente nada o muy poco pero tampoco era mi objetivo «volverme rico» con ello. Ahora tengo los libros que necesitaba sobre la materia, aprendí detalles de los objetos que coleccionaba, su historia, para que y porque se utilizaba y además en español (alguno también he publicado en inglés). Es algo que tiende a desaparecer por la facilidad que comentabas de tenerlo todo en internet y prácticamente gratis pero a algunos aun nos gusta el libro físico…para mi, donde se ponga un buen libro físico que se quite mirar las pantallitas de los móviles, las tablets, portátiles y los PC de sobremesa…eso de quedarse dormido leyendo, con el libro sobre el pecho, tumbado en el sofá es un placer irrepetible, je,je,je. Un saludo a todos y mi consejo que os evitará cometer los errores que yo he cometido: Leer mucho sobre la materia os evitará disgustos, os enriquecerá el conocimiento y os dará esa seguridad necesaria para adquirir las piezas que nos gustan.
Alguien que escribe 10 libros, es para tenerlo en cuenta! Enhorabuena, podrías recomendarnos alguno para no muy expertos?
La primera vez que le pregunté a un vendedor profesional por un libro/catálogo me preguntó ¡qué para que lo quería! «Total los precios están todos desfasados». Esto fue entre 1998 y el 2003, lo que me podía gastar entonces era de 20 a 30€ por pieza.
Ahora tengo varios catálogos generalistas, uno de ellos comprado en La Dobla el año pasado, y busco artículos en la web para completar el panorama histórico de cada pieza y lo hago así por que NO encuentro libros…
Si alguien me recomienda sobre las emisiones de los Borbones, el Centenario y duros del mundo, las gracias se las doy por adelantado.
Hola Bruno. ¿Has visto esto?:
https://blognumismatico.com/2020/11/24/descarga-gratuita-del-catalogo-numismatica-espanola-de-aureo-calico/
Es un buen catálogo y es gratuito. Luego si quieres existen muchas otras publicaciones gratuitas de Tauler & Fau por ejemplo:
https://blognumismatico.com/2021/12/29/descarga-libros-tauler/
Y como no, te recomiendo los míos sobre las monedas de los Reyes Católicos:
https://www.amazon.es/Casa-Trast%C3%A1mara-Los-Reyes-Cat%C3%B3licos/dp/B0BYGY8P51/ref=sr_1_2?__mk_es_ES=%C3%85M%C3%85%C5%BD%C3%95%C3%91&crid=2ZUIE5X8QO6WY&keywords=la+casa+de+trast%C3%A1mara&qid=1684069623&sprefix=la+casa+de+trast%C3%A1mara%2Caps%2C100&sr=8-2
O las de Enrique IV de la misma colección:
https://www.amazon.es/Casa-Trast%C3%A1mara-Enrique-IV-1454-1474/dp/B0C2S7MHVL/ref=sr_1_1?__mk_es_ES=%C3%85M%C3%85%C5%BD%C3%95%C3%91&crid=2ZUIE5X8QO6WY&keywords=la+casa+de+trast%C3%A1mara&qid=1684069654&sprefix=la+casa+de+trast%C3%A1mara%2Caps%2C100&sr=8-1
Saludos
Muchas gracias por tus referencias.
El catálogo de Auro y Calicó es el que tengo. Como dice Adolfo en la versión digital mejor que la de papel por que al final solo voy a usar una parte del mismo.
Conozco los enlaces de Tauler y Fau gracias a esta bitácora igual que los libros sobre la plata y el cobre de los Austrias.
Desconocía los libros sobre los Trastámara pero son de periodos anteriores a lo que yo colecciono. Una lástima para mí.
He leído sobre la Peseta de Aledón?
Gratuitos en pdf de Tauler&Fau aqui:
https://www.tauleryfau.com/es/ediciones-tauler/
Yo investigo y publico porque uno de los temas que más curiosidad que me causaba como principiante en la numismática con 7 años de edad, NO era cuando ‘valía’ la moneda, sino qué cantidad fue acuñada. En EEUU el ‘valor’ de la pieza siempre ha sido relacionado directamente con la cantidad acuñada (aunque ahora ha entrado a lo grande el tema de la ‘conservación’ de la pieza en su valor comercial).
Yo creo que mis libros sobre las cecas de Potosí y Lima (18€), Madrid (12€) y Segovia (8€) NO son caros, y tienen información valiosísima para ‘comprar monedas con la idea de revender a largo plazo en el futuro’ Y GANAR DINERO, basándose en las cantidades de cada pieza acuñada, algo que NO figura en los ‘catálogos’ donde solo aportan fotos y una supuesta ‘valor’ que en realidad no es mas que una estimación que va a variar constantemente en el futuro mientras los datos del numero de piezas acuñadas no va a cambiar nunca. Interesante entrada, Adolfo. Un abrazo y nos vemos pronto en Santo Domingo!
Y doy fé que son libros interesantisimos y llenos de informacion. Lo mismo ese tour grabado por el Ingenio de Segovia que me hubiera encantado estar. Saludos desde Argentina Glenn
Correcto Glenn, tus libros son muy buenos y a un precio bastante razonable. Vamos, que el que no compra un libro tuyo no será por el precio. Te felicito por siempre batallar contra el abandono de la ceca segoviana, por el empeño que le pones a la Asociación y por la labor de divulgación numismática que realizas. Saludos desde Valencia, un abrazo.
PD. En Alemania, país de cuyas monedas me ocupo en mi colección, también interesa mucho el número de monedas acuñadas.
Has dado bien en la tecla al expresar que la abundancia de bibliografia Numismatica se debe sobretodo al ego de varios coleccionistas y que hay un reducido interés de los coleccionistas en adquirir libros. En Sudamérica ha habido por otra parte, una abundancia en publicaciones en los últimos años pero centradas especialmente en catálogos de todo tipo y color y libros al estilo catálogo con breve info añadida con lo cual aportan muy poco y nada al contexto y no van más allá de las circunstancias de q haya mayor o menor cantidad de tal o cual moneda. Se visten de investigadores pero no indagan más allá de datos de cantidad acuñada de tal moneda o conjunto de monedas.y algun añdido extra más. Confunden investigación profunda con simples averiguaciones .por eso sus trabajos más allá del poco o mucho interés que exista no contribuyen casi en nada a revelar nueva información numismatica sobre tal periodo de acuñacion solo se trata se sacar una chapa de pseudo estudioso de tal campo de la numismatica y de conseguir espacios en convenciones para publicitar la nueva obra y sea aplaudida por la audiencia incidental. En verdad que obras nuevas de real estudio son escasas . Lo más recomendable sería editar un libro si se tiene algo novedoso que decir pliego de un profundo estudio y análisis y eso lleva bastante tiempo.
Mi principal intención al escribir esta entrada era promover el debate y creo que lo he conseguido. Los comentarios son muy buenos y me parece que dan una visión muy global (y por parte de personas muy autorizadas) del problema que comento.
Muchas gracias a todos,
Adolfo
En Facebook también han aparecido comentarios interesantes. Aquí os los reproduzco:
Luis Alberto:
«Son carismas los Catálogos, y muchos cómodos prefieren aprovecharse de la buena voluntad de otros y hacen miles de preguntas, ahora también quieren que se les diga cual es el estado de cada moneda que publican, están pasados de vivos»
Allan:
«Con el dinero que compras un libro te puedes compras varias monedas , sale cara la literatura numismática»
Francisco Manuel (respondiendo a Allan):
«Antes de comprar monedas debe estar uno informado»
José Luis Molina (respondiendo a Allan):
«claro, es respetable, pero luego corriendo a pedir información de lo que habéis comprado a los que sí se han gastado el dinero y su tiempo en libros y en leerlos»
José Hervás:
«Hay dos formas de entender la numismatica, una es la compra y venta sin más que te aporta la satisfacción de incrementar la bandeja y una segunda forma de entender es la científica en la que la conservación es menos importante que la historia de la pieza.
En la primera prima un poco el ego de yo la tengo más …, en la segunda prima el estudio y la catalogación más intimista.
Sin leer y tener una buena biblioteca no entiendo la numismatica.
Los ratos de catalogación, fichas y estudio no tiene comparación con el colgar la foto y que te hagan la catalogación.
Es mí forma de verlo que no quiere decir que sea la buena compañeros.»
Rafael Domínguez:
«Yo soy de papel,entre otros motivos porque me gustan los libros.hay algunos problemillas:unos son caros, carísimos,ninguno es completo y por último están los malos de cojones que no voy a citar por respeto.con el tiempo llegas a esas tres conclusiones,lógicamente los años te descubren las realidades y cuanto más aumenta la colección, más desengaños te encuentras o descubres…..soy consciente de lo que cuesta hacer un buen catálogo, pero precisamente por eso hay que hacerlo bien, de hecho algún día publicaré uno, cuanto más tarde, más perfecto lo haré y eso solo se consigue perfeccionando loas deficiencias de los demás. En cuanto a poner precios al menos orientativos, hombre no es una cosa que me preocupe, soy coleccionista no negociante, pero mejor tener una moneda valiosa que del montón y lo más importante, no pagarla como valiosa si es del montón.»
Glenn Murray:
«Un experimento mío… una AVENTURA NUMISMÁTICA, con el porqué de muchas de las cosas respecto a las monedas explicadas en su contexto histórico PARA QUE NO SE OLVIDA NUNCA (conocimiento). Se vende muy bien… claro… 18€ no es nada para uno que colecciona monedas… tal vez lo sería para okupas o un mendigo…»
Roberto Ortiz (respondiendo a Glenn):
«CONOCIMIENTO. Esa es la palabra que resume mejor lo que es un LIBRO. CONOCIMIENTO.
¿Cuál es el valor del conocimiento?.»
Glenn (respondiendo a Roberto):
«El valor del conocimiento es infinito.»
Roberto (citando a Glenn):
«Glenn Hola. Tus libros son información valiosa en varios aspectos. Tecnología, tirada, investigacion en archivos, museos,…Fotos de máquinas, de troqueles,…a los que casi nadie tiene acceso. Dibujos detallados y explicados sobre el funcionamiento, operativa de una ceca. Tus libros van a la esencia de la numismática. Aunque no halla mencionado la palabra historia, ya la moneda lo es, ya la tirada lo es, ya las técnicas de acuñación lo son. Las aleaciones, las leyes, el inicio de una ceca, el cambio de técnica de acuñación en la ceca,…
Yo de un libro numismático no me interesa el precio de mercado de las monedas. Tus libros tienen un precio accesible a todos los que colecciónan monedas. Y eso que hay en ellos información que tiene muchas horas de trabajo.
Un libro lo considero algo serio. Una responsabilidad. Hay que tener muy en cuenta el rigor a la hora de escribir, de matizar, de crear hipótesis,…de poner las fuentes. Por ello necesita un buen estudio, investigacion,…se trata de dar información buena.»
Dani Juste:
«Yo debo ser un bicho raro jeje, también colecciono libros de numismática. Última adquisición»
Glenn:
«Yo investigo y publico porque uno de los temas que más curiosidad que me causaba como principiante en la numismática con 7 años de edad, NO era cuanto ‘valía’ la moneda, sino qué cantidad fue acuñada. En EEUU el ‘valor’ de la pieza siempre ha sido relacionado directamente con la cantidad acuñada (aunque ahora ha entrado a lo grande el tema de la ‘conservación’ de la pieza en su valor comercial).
Yo creo que mis libros sobre las cecas de Potosí y Lima (18€), Madrid (12€) y Segovia (8€) NO son caros, y tienen información valiosísima para ‘comprar monedas con la idea de revender a largo plazo en el futuro’ Y GANAR DINERO, basándose en las cantidades de cada pieza acuñada, algo que NO figura en los ‘catálogos’ donde solo aportan fotos y una supuesta ‘valor’ que en realidad no es mas que una estimación que va a variar constantemente en el futuro mientras los datos del numero de piezas acuñadas no va a cambiar nunca. Interesante entrada, Adolfo. Un abrazo y nos vemos pronto en Santo Domingo!»
José Hervás (respondiendo a Glenn):
«lástima que los últimos sean on line. Como el soporte en papel no hay nada, decirme antiguo pero eso de la nube no lo veo»
Glenn (respondiendo a José Hervás):
«Mis publicaciones on-line están maquetados para poder llevar el pdf. a una imprenta local e imprimirlos por cuenta propia en papel. Es que a nosotros nos cuesta más ENVIAR un libro que imprimirlo. NO tiene gracia la cosa. Yo tembién escribo mis libros para numismáticos que no nacerán hasta dentro de 100 o 200 años, y en este sentido, la versión pdf. es más ‘duradero’. No lo sé… estamos atrapados entre 2 épocas… viendo los dos y comentando. Yo creo que el futuro es la impresión a demanda desde un pdf en una imprenta local, para los que quieren papel….»
José Hervás (respondiendo a Glenn):
«¿entonces liberas el Copyright del pdf.?»
Glenn (respondiendo a José Hervás):
«No hay copyright. No están los pdfs registrados. Lo único que pido es que se imprime por USO PERSONAL y no para cambiar la portada, nombre del autor y publicarlo como trabajo de otro PARA VENDER Y GANAR DINERO. Para eso iría a los Juzgados, y en nuestro mundillo numismático, cobraría el rechazo de todos. Si alguien quiere publicar para revender, conservando nombre de autor, etc. Podemos negociar algo. Llevo un tiempo hablando con unos en Lima sobre hacer una ‘reedición’ de mi libro POTOSÍ-LIMA para vender en el Perú. En casos así, siempre estoy abierto a negociar lo que sea.»
Pablo Luna:
«Mucho me agrado la frase “es difícil de pague por cultura”, no solo en libros, acá en Mexico conferencias, pocos asisten, en convenciones la parte cultural pasa desapercibida, algunas sociedades ya ni se molestan en hacerlo, al coleccionista nuevo no le interesa el “detrás de” de la moneda, solo lo comercial, ya bien lo apuntaba Glenn, yo creo es necesario descifrar el donde, cuando, como, porque de cada pieza.»
«Por otro lado, es cierto lo que redacta en su artículo Adolfo; del 2010 a la fecha en Mexico la publicación de libros ha ido en ascenso, aunque la gran mayoría son compilaciones de variedades, un coleccionista que tiene 60 monedas del mismo tipo que ilustra variedades del diseño y asigna rareza/precio, solo eso. Creo hace falta mayor investigación numismatica, historia de la moneda. Un servidor con lo poco que puedo colaboro en tal objetivo.»
Yo echo de menos en España maravillas gráficas como los libros o catálogos de Cgb.fr como Le franc Poche 2023, Le franc, les monnaies, les archives 2019 (pueden ver maravillosas muestras en su página) etc. No todo tienen que ser libros sesudos para mayor gloria de sus autores.
Esos catálogos tiene una edición gráfica, unas fotografías, unos cuadros gráficos , unas infografías etc que son una maravilla en las que da gusto dejarse el dinero además de poder elegir la edición física o digital.
¿Como es posible que en España no haya ni un solo libro así hablando del Centenario o de la moneda de los Borbones p.e.?
Buenos días,
Justo iba a decir esto… Catálogos generalistas como el Aledón, el Calicó o el desfasadísimo Cayón no tienen la calidad de un Le Franc pulido por años y años de ediciones y de añadir datos, fotografías, un «en qué fijarse» en cada moneda para saber su graduación. Uno de esos para La Peseta (existe una monografía en PDF con muchísimos datos, bien maquetado que podría ser el inicio de un perfecto catálogo).
Por otra parte, coincido en que tener una buena biblioteca adaptada a la colección es algo obligatorio si se quiere profundizar en el conocimiento del qué y el cómo se acuñaba moneda. Ahora mismo, existen buenos catálogos de ciertos períodos y guías anexas que completan una colección.
Un saludo,
P.D: las imágenes por IA tienen algo de irreal/surreal que me parece curioso :D
La numismática española es inmensa en comparación con la francesa. Sería posible hacerlo para la peseta, pero no sé si sería viable hacerlo para la moneda española porque saldría una enciclopedia.
No sé los años de trabajo que llevaría algo así y, si somos sinceros, es poco probable que vaya a ganarse nada con ello.
A veces he pensado en montar algo así, pero hacerlo en formato Wiki o similar. Es decir, que haya una comunidad de colaboradores voluntarios que vayan insertando los datos, proporcionando imágenes y explicando variantes.
Saludos,
Adolfo
Cada vez existen mejores libros sobre numismática, y menos catálogos sobre precios desde mi punto de vista.
Yo también soy una ave rara, colecciono libros de numismática y procuro que el autor me lo firme, aunque no siempre es posible.
Me encantan sobretodo los que aportan o explican, tipo los de Glenn Murray, José María Marín o Daniel Torres Micó y su círculo de autores- coleccionistas sobre Fichas locales y de casinos aunque no las coleccione.
Para los que buscáis un libro sobre el centenario os recomendaría El Catálogo básico de la Peseta de 1997 de Aledón, está descatalogado pero es una auténtica joya de información.
Saludos
Cómo autor de varios libros debo decir que la razón de editar no es ego…sino afición a estudiar lo q colecciono…por lo que decir que se edita por ego lo veo mal. Tampoco valoro las monedas en ello, pues no trabajo para el vendedor o comprador, sino para el coleccionista e investigador. Buscar información y fotos me entusiasma tanto o más que coleccionar. Se venden poco…es verdad…pero todos se venden finalmente, es cuestión de hacer una tirada razonable.
Mis libros ofrecen mucha información, y no quiero ser un referente, sino despejar caminos a los que vienen detrás de mí.
Lo importante para hacer un buen libro es tener tiempo, no querer sacar dinero con ello…y sobre todo juntarte con las mejores compañías…al fin y al cabo, editar libros me ha dado muy buenos amigos, a los que no conocería sino me hubiera metido en este mundillo.