Los resellos en los 4 maravedís de Santo Domingo

Este artículo se lo debemos a Yago Abilleira Crespo, a quien todos ya conocéis porque es el colaborador más prolífico del Blog Numismático. En el artículo aborda un tema poco conocido, como son los resellos en las monedas de 4 maravedís de Santo Domingo. Para ello se basa en el artículo de Antonio Roma Valdés “El resello en forma de llave a la luz de un tesorillo de moneda provincial procedente de Santo Domingo” (Gaceta Numismática, Marzo de 2006, páginas 19-28).

A quien no conozca las generalidades de la ceca de Santo Domingo le recomendaría leer el artículo que publiqué al respecto el pasado abril. Así, seguro que disfruta mucho más de este texto de Yago.

El artículo ha sido revisado por José Manuel Henríquez, presidente de la Sociedad Numismática Dominicana. Las imágenes que ilustran el artículo fueron extraídas de la base de datos de Áureo & Calicó.

4 maravedís de Santo Domingo

La gran mayoría de los coleccionistas de moneda de la monarquía española saben que la moneda más común de la ceca Santo Domingo son los “4 maravedís” de Carlos y Juana, llamados cuartos. Es una moneda algo complicada de encontrar con calidad, pues suelen estar machacadas, pero en calidades bajas son muy económicas. Sin embargo, a veces, aparece alguna resellada (marcada), y ahí es dónde estaba la confusión. No se trata de los típicos resellos de los Austrias con un número arábigo o romano variando el valor nominal de la moneda…¿qué significan?

El diseño es bastante sencillo, pues por una cara vemos una Y coronada con el ensayador F (Francisco Rodríguez) y el valor 4 (ó IIII). En la otra cara, las dos columnas de Hércules coronadas y a sus lados una S y una D (que parece una P) de Santo Domingo. La leyenda en ambas caras hacen referencia, en latín, a Carlos y Juana como reyes de España y las Indias, pero hay multitud de variantes. Otras variantes son el valor en números romanos o arábigos, el tipo de las S y D de las cecas, la colocación del ensayador…y seguro que me dejo más. Carecen de año de acuñación, lo que complica las investigaciones.

Santo Domingo, 4 maravedís.
Santo Domingo, 4 maravedís.

La moneda es vellón con un 18,75% de plata (dos dineros y cuarto) y un peso de 3,64 gramos…al menos en teoría. El tema de la ley auténtica con que se acuñaron es un terreno fangoso. Hay dudas de que realmente se llegase a acuñar un vellón tan rico, siendo muy probable que cuando se empezaron a acuñar en 1546 tuviesen la ley imperante en Castilla de 0,57% de plata (7 granos). Parece ser que aún así las monedas salían de la isla rumbo a la Península, no quedando casi ninguna para el comercio local.

En 1552, como ocurrió en toda Castilla, se le rebajó la liga de plata a un 0,45% (cinco granos y medio) y, después de 1558 aún se rebajo al 0,2% (dos granos y medio) por una fuerte crisis local, pero ni eso se pudo cumplir, pues pasó a ser simple cobre. Además, había muchas falsas por ser el valor facial mayor que el del metal. Por todo ello los cuartos quedaron totalmente desacreditados.

Según Henríquez, la razón por la que estas monedas tienen tan poca plata es porque en La Española no había minas de este metal e importar plata de México o Potosí se convirtió en una empresa imposible porque encarecía mucho el producto. Por lo tanto, era muy difícil añadir plata a las monedas que supuestamente eran de vellón. Las crónicas de la época indican que para acuñar monedas en Santo Domingo las esposas de los funcionarios de la Casa de la Moneda llevaban sus vajillas de plata para convertirlas en monedas. 

No me queda muy claro cuándo se dejaron de acuñar los cuartos, pues hay autores que indican 1558 ó 1564. Pero hay un documento fechado en 1593 en que la ciudad de Santo Domingo pide que ninguna persona pueda labrar la moneda de cuartos que allí corre, evitando el abuso que hay con la mala moneda de vellón.

Y, como no podía ser de otra manera, ya vino el jaleo con el vellón de los Austrias… En 1556 se acordó que un real se cambiase por 11 cuartos, en vez de los 8 teóricos. Aunque ese tipo de cambio era el oficial, pues en la calle se cambiaban 51 cuartos por un real. De hecho, en 1562 se propuso crear un banco en Santo Domingo que emitiese letras y fianzas por ser la moneda de esa isla cuartos se pasa gran trabajo, que por no ponerse a contar no los quieren recibir.

Contramarca “llave”

Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “llave”.
Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “llave”.

Ahora había el problema de un exceso de moneda de vellón que, además, no tenía equivalencia en Castilla, pues los cuartos eran exclusivos de Santo Domingo. Así que en 1577 se da orden de marcar los cuartos para que valgan 2 maravedís de Castilla, inflándose así su valor. Y de ahí el resello, pues al marcar la moneda subía de valor y el exceso con respecto a lo entregado se lo quedaba la audiencia dominicana. 

La marca elegida fue una llave. ¿Por qué una llave? Pues porque ese elemento formaba parte del escudo de Santo Domingo. Por cierto, no se habla de resellos en la documentación, si no de “contramarca”.

Contramarca “ancla”

En Jamaica, entonces Santiago de Jamaica, había una gran escasez de circulante. Así que en 1581 o en 1582 se llevaron a Jamaica unos 100.000 cuartos de Santo Domingo. Allí se marcaron con un ancla para validarlos, y se cambiaban a 11 cuartos el real. Parece ser que se eligió un ancla por figurar en el escudo de los Colón, marqueses de Jamaica.

Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “ancla”.
Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “ancla”.

Contramarca “S”

Posteriormente, desde 1611 hasta 1616, se volvieron a marcar cuartos en Jamaica con una S (de Santiago), para que se cambiaran 7 piezas por un real. Se debieron de llevar más cuartos a Jamaica, pues hay monedas sólo marcadas con una S, sin ancla.

Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “ancla” y “S”.
Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “ancla” y “S”.

Otras contramarcas en los 4 maravedís de Santo Domingo

Los cuartos circularon por Canarias, cambiándose a 8 piezas por real, y allí fueron marcados con una hoja de palma (Las Palmas), una flor (Lanzarote), etc. Precisamente el hecho de que allí se usasen fue aprovechado por los ingleses en 1655, cuando tomaron Jamaica, pues utilizaron las monedas capturadas para comerciar con Canarias, con la consiguiente preocupación de las autoridades del archipiélago.

Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “palma”.
Santo Domingo, 4 maravedís. Contramarca “palma”.

¿Qué contramarcas puede llevar un cuarto de Santo Domingo?

Pues ahí está la gracia. Lo normal es que lleve una sola. La de la S debería llevar también la del ancla, pero existen ejemplares sin la primera contramarca. Y teniendo en cuenta que hay monedas marcadas con llave y con ancla, no se descartaría que hubiera monedas con las tres contramarcas.

A modo de epílogo

En 1586 el pirata Francis Drake saqueó Santo Domingo. Esta ruinosa incursión supuso unas pérdidas del 75% para los “inversores” de esta expedición, así como un duro golpe económico para la isla. Aparte de incendiar el archivo, borrando así una parte de nuestra historia, Drake se hizo con un botín en el que había una partida de 1,2 millones de cuartos, aproximadamente. El hecho de que los tratasen como simple cobre al peso da idea de la casi nula (o nula) plata que tendrían. Y aún así en 1593 había quejas sobre el exceso circulante. Sin embargo, pronto vendría la escasez, ya que los cuartos valían más en Puerto Rico, por lo que se fueron llevando hacía allí de modo que en 1608 se baraja la posibilidad de volver a acuñarlos ante la falta de moneda de vellón en la isla.

Bibliografía consultada

AGI, Santo Domingo, 1 N.7 (sobre la prohibición de labrar moneda en 1593)

AGI, Santo Domingo, 869, L.5, F. 189V-190R (sobre nuevas acuñaciones en 1608)

AGI, Santo Domingo, 899, L 1, F. 271R-271V (sobre la creación del banco)

Medina Gil, Santiago M. “Canarias. Monedas y resellos. Siglos XIV-XVIII” (sobre los cuartos dominicanos en Canarias).

Sebastián Romero, Ramón “La moneda de cobre y vellón de la Monarquía Española (1474-1718)” (para la evolución de la ley de los cuartos).

VVAA. “La Batalla del Mar Océano”, documento 2209 (sobre el botín de Drake en 1586)

Comentarios en: Los resellos en los 4 maravedís de Santo Domingo

  1. Magnífico trabajo, Yago. Estos cuartos dominicanos tuvieron un papel fundamental en el día a día de Canarias hasta 1775. Si ya son bien conocidos los troqueles aplicados en Gran Canaria, La Palma y Tenerife, los realizados en Lanzarote, el el siglo XVII, y los hallados Fuerteventura son el mejor exponente de estas «incansables viajeras».
    Saludos.
    S. Medina

  2. Santiago, es todo un placer que un gran conocedor de la moneda canaria lea este Blog.
    Para quien no conozca a Santiago Medina, es el autor del libro «Canarias. Monedas y resellos. Siglos XIV-XVIII». Precisamente Juan Luis me comentó que en ese libro se citan 21 resellos canarios distintos en monedas de Santo Domingo. Son todos resellos rarísimos.

    También he actualizado la entrada con uno de esos resellos que me ha pasado Vicenç. La foto no tiene mucha calidad, pero es la única de la que dispongo (al parecer se obtuvo del foro Imperio Numismático).

    Saludos,
    Adolfo

  3. Muchísimas gracias por este interesantísimo artículo. Yo no sabía nada de esta ceca ni de sus resellos y he quedado sorprendido de leer tanta historia de una ceca tan pequeña y tan «aislada» numismáticamente hablando, por carecer de plata para las acuñaciones. Gracias por este viaje histórico.

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