Antoniniano de Macriano

El fatídico año 260

Bien se puede argumentar que el punto más bajo de la crisis del siglo III fue el año 260. El otrora omnipotente Imperio Romano estuvo a punto de caer como un castillo de naipes. Fueron tiempos con muchas convulsiones políticas y, por eso mismo, muy interesantes desde el punto de vista numismático. Intentaré resumir la compleja situación:

A principios del 260 imperaba en Roma la Dinastía de Valeriano. Valeriano había sido emperador desde el año 253 y, viéndose incapaz de controlar todo el Imperio, pronto nombró Augusto a su hijo Galieno. Roma tendría dos co-emperadores para poder ser mejor gobernada. Los problemas que tenía Roma eran tales que dos augustos no eran suficiente. Por eso, en 256 nombraron César al joven Valeriano II (hijo de Galieno y nieto de Valeriano) para que representase el poder imperial en Panonia. El pobre muchacho murió en extrañas circunstancias en el año 258. De forma semejante, en 258 nombraron César a Salonino (otro hijo de Galieno) para que comandase las tropas en el limes del Rin; en 259 o 260 murió a manos del usurpador Póstumo. 

Esta era la situación general en la que estaba Roma, a la que habría que añadir problemas de pestes e invasiones godas. A pesar de ello, Valeriano armó un ejército y marchó contra el Imperio Sasánida. Este imperio estaba comandado por el mismísimo Shapur I. Se enfrentaron en la Batalla de Edesa y Roma sufrió una de las derrotas más humillantes de su historia. Tanto fue así que el propio Valeriano fue hecho prisionero. ¡El emperador de Roma prisionero de los persas sasánidas!

Tras la Batalla quedó Galieno como único emperador de Roma. Pero no por mucho tiempo: a la usurpación de Póstumo en la Galia se le sumó la de Macriano en el Este. Este Macriano –comúnmente llamado Macriano I o Macriano el Viejo– pertenecía al orden ecuestre (es decir, no era noble, sino que ascendió socialmente por una exitosa carrera en el ejército) y no pidió para la púrpura para sí, sino para sus dos hijos:  Macriano (generalmente llamado Macriano II o Macriano el Joven) y Quieto. Como Macriano el Viejo no acuñó monedas, en la numismática es común citar a Macriano el Joven simplemente como “Macriano”: no hay margen de error en lo que a las monedas se refiere. 

Macriano el Viejo entendió que debía avanzar hacia Roma para derrocar a Galieno y hacerse con todo el Imperio (al contrario que Póstumo, que simplemente controló el llamado Imperio Galo). Así, fueron Macriano el Viejo y Macriano el Joven con las poderosas legiones del limes oriental hacia Roma, dejando en Emesa (Siria) a Quieto. Sin embargo, las tropas de Galieno, comandadas por Aureolo, consiguieron vencerlos en el año 261. El mismo Aureolo que años después sería un usurpador (existen dudas de si acuñó monedas; si lo hizo, fue a nombre de Póstumo). Tras la derrota el co-emperador Quieto duró poco tiempo vivo, como era de esperar.

Entiendo que esta sección ha sido muy densa por la cantidad de personajes que han aparecido. Para facilitar el aprendizaje, os dejo un esquema con la Dinastía de Valeriano y los personajes relacionados con el año 260. Si queréis profundizar sobre este tema os vuelvo a recomendar el podcast El Ocaso de Roma. 

Las monedas de la Dinastía de Macriano

La Dinastía de Macrino apenas duró un año. Macrino el Viejo no acuñó monedas porque nunca fue nombrado Emperador. En cambio, se acuñaron monedas a nombre de sus hijos en el territorio que aceptó su autoridad.

En el caso de Quieto nos encontramos antoninianos en las cecas de Asia Menor: Antioquía, Nicaea y Samósata. A nombre de este emperador se acuñaron antoninianos y unos rarísimos áureos. Curiosamente, en 2019 se publicó un áureo a nombre de Quieto encontrado más allá del limes del Danubio. Esto hace pensar que se acuñaron unos pocos áureos a nombre de este emperador para pagar a los mercenarios godos que apoyaría la marcha de Macrino contra Galerio. [EDITADO 07/09/2022]

En el caso de Macrino, encontramos monedas acuñadas en las cecas de Asia Menor y también unas pocas en Alejandría. La mayor parte de esas monedas son antoninianos acuñados en Antioquía. También existen áureos que, si bien no son únicos como en el caso de Quieto, no dejan de ser rarísimos.

Macrino y Quieto no hicieron grandes innovaciones en los aspectos estilísticos de las monedas, como era de esperar. Acuñaron siguiendo el estilo de gobernantes anteriores. Para ilustrar esto que digo se puede comparar el antoniniano de Macrino que encabeza la entrada con el de Valeriano II, ambos de la ceca de Samósata (el RIC las marca como de Antioquía) y representando a Spes en el reverso. Se puede observar que apenas hay diferencias estilísticas ni de motivo, más allá del obvio cambio en el busto del emperador y las leyendas del anverso.

A pesar de que Macriano y de Quieto acuñaron monedas en grandes cantidades para financiar la contienda militar contra Galieno, su usurpación fue tan corta que hoy en día son monedas raras. Especialmente si se buscan tan bonitas como la que se muestra más arriba.

La próxima subasta de Áureo & Calicó

Áureo & Calicó arranca el curso con una subasta online el día 14 de septiembre y con el quinto volumen de la Colección Tomás Prieto el 15 de septiembre. Ahora comentaré brevemente la subasta del 14 de septiembre, dejando para otra entrada la Colección Tomás Prieto.

La subasta online se trata de una subasta muy amplia que da un repaso a la historia de la numismática en 1994 lotes. La práctica totalidad de los lotes son monedas en calidades medias y no muy raras; aptas para los coleccionistas de a pie, que somos la inmensa mayoría. Como series, me han gustado las monedas romanas bajoimperiales, los dineros medievales, las monedas de Besançon, los cobres de los Austrias, los cobres de Isabel II y los billetes locales de la Guerra Civil. La colección de 20 francos franceses también es digna de mención para quien quiera invertir en oro. 

A nivel individual me ha gustado el antoniniano que encabeza esta entrada, los 2 escudos madrileños de Fernando VII y, sobre todo, la moneda de 10 céntimos resellada que nos enseña que “legia y azul Cometa quema la ropa”. 

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Descripción Áureo & Calicó

(260-261 d.C.). Macriano. Antoniniano. (Spink 10811) (S. 13) (RIC. 13a). Plateado original íntegro. Bella. Ex Áureo & Calicó 11/12/2019, nº 1069. Escasa. 3,95 g. EBC.

Fuente.