Comprobar las cápsulas de NGC y PGCS

Me ha escrito el bueno de Enrique por una historia que le ha pasado (los enlaces los he añadido yo).

Enrique es un aficionado a la numismática a quien le gusta la moneda de la Monarquía Española. Tiene una colección interesante de platas de los Austrias y alguna vez ha hecho sus pinitos con oros macuquinos que le han hecho abrir la cartera. De moneda clásica no entiende demasiado, pero aun así le ofrecieron las tres monedas que ilustran esta entrada.

El tipo que le ofreció las monedas decía que eras piezas muy valiosas que había heredado de su abuelo y que las había mandado a encapsular. Pedía por ellas 25.000 euros.

Enrique las miró y de entrada confió en las piezas porque venían certificadas. Luego vio que ya solo el áureo de Hostiliano bien podría valer ese dinero, más aún en la calidad en la que se encuentra. Aún así intentó regatear un poquillo el lote, pero el vendedor se negó a bajar ni un euro. Según decía, sabía bien que esas monedas valían más.

Afortunadamente Enrique usó el servicio de comprobación de certificados que ofrece NGC y ahí es donde levantó el pastel: esas cápsulas de NGC son falsas. No hay más que comprobar el código del certificado para llegar a tres monedas (una, dos y tres) que no tienen nada que ver con las que le habían ofrecido a Enrique. Ni qué decir tiene que mandó al vendedor a paseo y hasta nunca.

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El palo del que se libró Enrique fue considerable. La moraleja a sacar es la de siempre comprobar las cápsulas de NGC y de PGCS (esta última empresa ofrece un servicio semejante, más). La razón es sencilla: igual que se falsifican las monedas se falsifican las cápsulas. De hecho, falsificar una cápsula es bastante más sencillo que falsificar una moneda. Además, una vez encapsulada es más complicado determinar si la moneda es auténtica o falsa, puesto que ya no se la puede medir, ni ver bien el canto, ni pesar, ni ponerla debajo de un microscopio. Así, nos encontramos que en China se están falsificando monedas y certificados a gran escala, lo cual admite la propia NGC y lo comentan muchos coleccionistas (un ejemplo y otro). Esto no solo atañe a la moneda clásica –de la que ya sabéis que NGC no garantiza su autenticidad– sino también a monedas contemporáneas e incluso bullion.

Afortunadamente demostrar la autenticidad de una cápsula es mucho más fácil que demostrar la autenticidad de una moneda. La idea es que la entidad emisora de la cápsula, además de proporcionar la cápsula en sí, publica en una web alojada en su dominio las características de la moneda relacionada con el código en cuestión. De esa forma, cualquiera que tenga una moneda encapsulada en la mano puede comprobar en la web de la empresa de certificación si dicha cápsula es auténtica. Esto no significa que la moneda sea auténtica, sino que efectivamente ha sido encapsulada por esa empresa certificadora.

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En otros casos parece que la cápsula puede ser auténtica pero la moneda falsa. Según parece si la empresa certificadora se percata de su error, elimina el código de su web. Es una manera de «invalidar» una cápsula auténtica. De nuevo el coleccionista se puede percatar sin más que buscar el código en la web de la empresa certificadora.

Por último os recuerdo que ya vimos casos de problemas derivados de los certificados de monedas: un listo incurrió en falsedad documental al falsificar un certificado de Áureo; otros dan el cambiazo con las fichas de subastas; y otros usan como certificados de autenticidad documentos que no lo son.

12 comentarios en “Comprobar las cápsulas de NGC y PGCS”

  1. Yago Abilleira Crespo

    Bueno. Es obvio que también aprenderán a falsificar bien las cápsulas. Entre eso, y que seguro que mejorarán las falsificaciones de monedas, pues aviados vamos.
    La recomendación de siempre: Comprar a un profesional.

  2. … si a esto le sumamos que la certificación de las encapsuladoras para este tipo de piezas (lo que llaman ANCIENT) se limita a la calidad y no a la autenticidad, estamos fritos!!!

  3. Hola
    En estos casos es facil de descubrir la falsificacion por que los numeros de codigo no coinciden con la moneda, pero cuando los chinos se den cuenta y empiezen a falsificar clonando capsulas originales con su correspondiente moneda falsa veremos que hacemos, por que se podra ingresar a comprobar por el codigo y este correspondera, y no habra manera de darse cuenta de que es falsa, tanto la capsula como la moneda.
    Saludos

    1. A esto venía yo, si se puede sacar el tipo de moneda a través del código de barras , podrían imitar la moneda según el codigo sacado de su página web. Desconozco si sale imagen en su página web pero sin imagen sería muy fácil para ellos engañar

  4. En los billetes PMG, en su web puedes comprobar su identificación a través de la numeración que aparece en la parte de atrás. Y aparece ese billete fotografiado con su correspondiente número de serie, algo más difícil de falsificar, ya que las monedas no llevan numeración de serie…….pero aún así cuidado.

  5. Adolfo Ruiz Calleja

    Supongo que no sea tan sencillo falsificar los números de serie para que coincidan con los de una moneda auténtica.

    Lo primero, porque las webs de las monedas/billetes en PCGS, NGC y PGM llevan fotos. Así que es fácil identificar el ejemplar concreto.

    Lo segundo, porque a los falsarios el negocio les funciona cuando falsifican en serie. No les compensa falsificar un par de monedas (o cápsulas), sino cientos o miles. En cuanto estas empresas certificadores detecten una falsificación de un número de serie entiendo yo que retirarán el número de serie auténtico también.

    Saludos,
    Adolfo

  6. Resultado acabas de dar la solucciona los falsificadores, erllos cuandfo falsifiquen deben de comprobar antes un numero de certificado que concuerde conla falsificacion que posee, con unos leves retoques y metido en un sacofrago de las casas certificadoras, sera facilisimo dar el timo.
    Yo no confio en esas casas certificadoras, en primer lugar porque es un negocio y en segundo porque he visto sacogragos con por ejemplo una moneda de 8 maravedis de 1828 de Fernando VII Segovia, diciendo que era un 2 reales de Felipe V 1728 Segovia, es dercir pienso que un error, pero los hay y muchos, ellos cobtrando ya tienen suficiente.

  7. Hola a tod@s,

    simplemente comentar que las monedas de las fotos no vienen encapsuladas con certificado PCGS ni NGC. Pone PCCB con holograma y todo pero PCCB.
    Si buscais PCCB en Aliexpress podreis verlas.
    Si la busqueda es PCGS no qparece nada relacionado con monedas.
    Asi que si veis una capsula con PCCB, ya sabeis lo que hay que hacer

    Saludos

  8. Las cápsulas no son garantía de nada. Hemos visto macuquinas clónicas encapsuladas por PCGS y por NGC. Hemos visto subastar por profesionales monedas en excelente estado, pero abrillantadas, y seis meses más tarde vueltas a subastar con cápsula PCGS como «proof». Hemos llegado a ver las 100 pts de Franco «palo recto» manipuladas, pero encapsuladas como genuinas; este último caso daba risa, además, porque la «seguridad» que te ofrecen esas cápsulas te encarece la pieza de forma bárbara.

    Lo que sí hay que reconocer a las compañías de «third-party grading service» es que, una vez la moneda está en su «slab», en su cápsula, resulta mucho más difícil determinar si ha sido manipulada, limpiada, o si es directamente falsa. Es decir, es bien posible que hayas sido víctima de un engaño (o de un error, que no siempre hay que suponer mala fe); pero vas a estar mucho más tranquilo, porque no lo sabrás.

    Innecesario decir que, mutatis mutandis, ocurre lo mismo con los billetes.

    Y como detalle adicional, para que se aprecie la profundidad del asunto: en algunos casos, el mismo «profesional» que te encapsula la moneda es quien precinta ejemplares de comics. Me lo dijo él.

    1. Adolfo Ruiz Calleja

      Garantía al 100% no se tiene bajo ningún método.

      Ahora bien, un coleccionista novel debe entender que tiene una garantía suficiente si su moneda ha sido garantizada por un profesional serio, ya sea una empresa de graduación, una casa de subastas o un comerciante autónomo. Los errores que puedan tener son la excepción y no la regla, si bien esas excepciones generan mucho eco.

      Una vez que el coleccionista adquiere cierta experiencia aprenderá a detectar las falsas por sí mismo e incluso llegará a ser más experto en esa serie concreta que los propios profesionales.

      Saludos,
      Adolfo

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