Entrevista a Javier Avilleira

Hoy tengo el privilegio de poder entrevistar a Javier Avilleira, quien es para mí el principal autor en lo que a la numismática uruguaya se refiere. Javier es coleccionista de monedas así como autor de muchos artículos (ha colaborado mucho en revistas como UNAN Numismática, podéis leer artículos suyos en los números 22 y 24) y de varios libros: «Uruguay – Vales y cobres (1867-1871)«, «Barriga-Caso-Beiso. Últimas acuñaciones de monedas del siglo XIX» y «Acuñación de 1877. La Historia«. También fue director de edición de la revista UNAN Numismática, aunque dejó el puesto hace un tiempo por motivos laborales. Por último, quisiera destacar que Javier ha participado en eventos de divulgación numismática dirigidos a un público más amplio, como en este programa de radio (muy recomendado).

Espero que os guste la entrevista. Creo que es una suerte poder contar con el testimonio de Javier Avilleira porque nos ofrece mucha experiencia sobre cómo se colecciona y cómo se divulga la numismática en Sudamérica.

Adolfo (A): Antes de nada quisiera hacer una pregunta personal. ¿Qué monedas coleccionas? ¿Qué te atrae de ellas?

Javier Avilleira
Javier Avilleira

Javier Avilleira (J): Antes que nada debo ser yo el que debe agradecer por el privilegio de ser entrevistado por ti Adolfo y para tu prestigioso Blog Numismático.

En cuanto a mi colección de monedas es muy variada, como la mayoría de los uruguayos que nos gusta la Numismática, colecciono monedas de mi país a los cuales agrego el papel moneda de los bancos particulares del siglo XIX. Así como la de los países limítrofes: Argentina, Brasil y otro muy cercano, Paraguay. Pero además soy un poco fanático a la colección de monedas por tema. Hace muchos años atrás elegí coleccionar monedas referentes a la Marina. Lo que me atrae de las monedas de mi país principalmente las primeras de ellas, es el contenido histórico que tienen detrás, como por ejemplo el conocido “Peso del Sitio” [primera moneda], o el enigma del “Sol de Cabellera” [segunda moneda], la primera nombrada fue  acuñada en plata y la segunda en cobre [hablamos de ellas aquí]. Nuestras primeras monedas las admiramos mucho más cuando llegamos a conocer su historia y por todo lo que se pasó y sufrió para poder tener un país independiente. En cuanto al monetario de los países vecinos, por ejemplo las primeras monedas de Argentina (Provincias Unidas del Río de la Plata, la cual Uruguay llegó a ser parte) pasa algo parecido: éstas fueron acuñadas en Potosí y tienen una rica historia detrás de ellas. Personalmente asocio las monedas con la historia o leyendas de las mismas, y por supuesto con las personalidades y personajes de la época.

En cuanto a la colección temática, son monedas que me han servido para conocer como en este caso la historia de la “La Marina”, desde sus comienzos a la época actual, en ellas podemos apreciar los distintos tipos de embarcaciones y como han ido variando. Gracias a esta colección he realizado algunas exposiciones, entre ellas para el 181º aniversario de la Armada de mi país en el Museo Naval que se encuentra en Montevideo. Con la colección temática me divierto un poco más porque uno la hace a su gusto y alcance del bolsillo y trato que la misma guste al público que tiene la posibilidad de observarla. Generalmente en la tarjeta en la cual va la moneda presentada, no solo contiene los datos de ella, es decir peso, diámetro, metal, valor, etc., sino también la historia de la nave presentada y algunas curiosidades de la misma. Hay otros tipos de monedas que me gustan y colecciono, entre ellas las monedas y billetes de necesidad de Alemania, los conocidos Notgeld.

A: Cuando estuve por Montevideo me pude acercar a una convención numismática. Ciertamente me gustó mucho y lo disfruté. Sin embargo, vi que había muy pocas monedas de calidad y las que había, me parecieron muy caras para la calidad que tenían. Supongo que se deba a que el mercado es muy pequeño. ¿Se hace complicado encontrar monedas de calidad? ¿Cómo es de difícil forjar una colección interesante en Montevideo u otras partes de Sudamérica?

J: Comparto con tu visión e inclusive llegué a leer un artículo tuyo referente al tema [éste]. Las monedas de calidad no son sencillas de encontrar y si aparecen tienen su valor. Todo depende también de lo que uno busque, si son monedas como en este caso de mi país. Las primeras monedas conocidas como “cobres clásicos” o el ya nombrado “Peso del Sitio” tienen su valor. Esto se debe a la escasa cantidad de monedas acuñadas y a que su acuñación fue realizada en Montevideo. Desde 1857 nuestras monedas se hicieron fuera del país. Tal vez algunos valores se encuentren con un poco más de facilidad, pero el estado de conservación de ellas hace la diferencia. A pesar de que en Uruguay el mercado es pequeño en comparación de otros países, algunas piezas como las anteriormente nombradas son complicadas de conseguir. En cuanto a monedas de otros estados ahora es un poco más sencillo adquirirlas debido a que Internet ha facilitado esa tarea bastante. Antiguamente  cuando empecé a coleccionar esto no era así, en mi país no eran muchos los comercios numismáticos, se iba a la feria de Tristán Narvaja y para nosotros la meca era ir a Buenos Aires donde el mercado era, en comparación a lo nuestro, inmenso. Por ser un puerto de mayor importancia se podían encontrar gran variedad de monedas, no solo de América sino de las regiones que nosotros llamábamos «exóticas».

Javier Avilleira

A: En cuanto a las temáticas específicas, por lo que veo muchos coleccionistas sudamericanos centran sus colecciones en la numismática de su país (esto pasa en todas partes). Son países relativamente recientes, con menos de 200 años en muchos casos. Además, durante buena parte del siglo XIX muchos de estos países tuvieron emisiones muy cortas, llenas de rarezas que son caras y difíciles de conseguir. ¿Se puede tener una colección interesante con monedas de un periodo tan específico y un territorio tan concreto?

J: Esto es un poco medio parecido a lo que te he contado anteriormente. Somos naciones jóvenes comparadas a los países europeos. Entre los países de Sudamérica hay algunos que tienen más antigüedad que otros. Por ejemplo Brasil tiene su antecedente de ser colonia portuguesa y tener sus propias casas de moneda y ahí podemos encontrar una muy interesante colección, desde sus inicios como colonia hasta ser lo que es hoy en día. Uruguay tiene muchas menos monedas pero el primer periodo es muy interesante por lo que he comentado anteriormente. Además, uno puede también agregarle a esto el monetario precursor, es decir monedas que circulaban en nuestra Banda Oriental, monedas de las colonias españolas que eran las que se utilizaban en estos lares. Argentina tiene lo suyo con sus primeras monedas patrias y sus casas de monedas en algunas provincias como La Rioja, Córdoba, Mendoza, etc. A pesar de ser territorios nuevos, como tú dices, hay monedas raras por su corta emisión. Eso hace que sea posible armar colecciones interesantes. Todo lleva su tiempo y requiere mucha paciencia esperando la  pieza faltante. El coleccionismo tiene eso: esperar y un poco de suerte.

A: En mi opinión, la historia de los países sudamericanos (e incluso del centro y norte de América) no se puede entender aisladamente durante buena parte de su historia. ¿Cómo se refleja esto en la numismática? ¿Qué rasgos son comunes a los países sudamericanos? ¿Qué eventos afectaron a todos por igual y qué eventos diferenciaron a unos países de otros?

J: Nuestros países fueron colonias de España y Portugal. El sentir la necesidad de tener su propia autonomía hizo que cada uno tuviera sus monedas. Pero nos costó bastante tener un sistema monetario propio. Por ejemplo, las primeras monedas patrias de Argentina se llamaban “Reales” y “Escudos”, denominación de las monedas de la madre patria; la novedad fue la llamada “Soles”. En Uruguay lo podemos apreciar con sus primeros cobres  patrios con sus valores de 5 y 20 centésimos de “Real”. Tanto Argentina como Uruguay en sus primeras monedas utilizan el “Sol”. Además, ambos países lo tenemos en nuestras banderas. Este Sol se entiende como un símbolo de Libertad; algunos dicen que está basado en el Sol de los Incas, un sol americanista. Podemos agregar por ejemplo que Perú, su moneda se ha llamado a través de los años, Sol o Inti.

Javier Avilleira

A: Por otro lado, veo que monedas latinoamericanas potentes se ofrecen con bastante frecuencia en las subastas estadounidenses. Me da la sensación de que todas las monedas fuertes se vendiesen en el extranjero. ¿Es esto así o también hay otros medios de adquirirlas? ¿Soléis comprar los coleccionistas locales en subastas estadounidenses?

J: Se da un poco como tú dices: las monedas latinoamericanas se pueden encontrar muchas en el exterior principalmente Europa y Estados Unidos. Eso puede tener una explicación. Como decíamos anteriormente nuestros países son jóvenes con respecto a otros. Coleccionistas de monedas existieron desde hace mucho tiempo atrás y monedas de una nueva nación siempre son atrayentes para tenerlas en sus colecciones. Lo mismo pasa ahora, cuando un territorio se declara independiente la mayoría tratamos de tener una moneda del mismo y eso pasaba antes también. Muchas de nuestras monedas se han ido al exterior pero ahora, como dije anteriormente, gracias a internet podemos saber dónde se encuentran y repatriarlas. Hay personas que sí compran fuera de nuestro país pero se depende de otro factor que también que incide: el poder adquisitivo de los coleccionistas. Por eso, muchas veces esas monedas son compradas por otros extranjeros y pasan a otras colecciones.

A: Otros aspectos que querría comentar es tu faceta como autor y editor, aprovechando que conoces tan bien el panorama de difusión y divulgación numismática. Me resulta realmente curioso que en Sudamérica, a pesar de que tradicionalmente ha habido pocas publicaciones ahora haya una buena cantidad de revistas de difusión y divulgación numismática. Además, son revistas en papel. Sin embargo, en España últimamente han cerrado casi todas las que quedaban (que no eran muchas). ¿A qué crees que se debe esta aparente contradicción? ¿Crees que sigue quedando recorrido a las revistas numismáticas sudamericanas?

J: Ha habido un auge de nuevas instituciones numismáticas y todas ellas han sacado o querido sacar sus propias revistas, eso ha pasado en los países de mayor tamaño como por ejemplo Argentina. En estos últimos años en ese país se ha creado FENYMA (Federación de Entidades Numismáticas y Medallísticas Argentinas) y así ha pasado también en otros lugares como Colombia y Perú.

El tema de la revista papel lo he comentado con otros colegas de acá y de argentina y coincide que todos prefieren leer la revista y tenerla en sus manos, que leer una revista digital. Ellos dicen que les cuesta más leer la revista digital. Pero esto pienso que ha ido variando debido a los costos de imprimir y va a ir variando también en que nos adaptemos a leer revistas digitales.

Por ejemplo, publicar una revista en Uruguay no es nada barato y el mercado no es grande, esto hace que publicar un trabajo sino es con sponsor no se puede sacar muchas veces para el costo de la misma. El Instituto Uruguayo de Numismática por muchos años ha publicado su Boletín. En estos últimos años va sacando menos de uno al año. Pero personalmente, como te dije anteriormente, por lo que veo va ganando el camino la revista digital en muchos países. Algunas de estas revistas digitales han impreso las mismas pero en poca cantidad y muchas veces para casos especiales como obsequios a personalidades o bibliotecas.

A: Como autor te has centrado siempre en la numismática y la exonumia de Uruguay. Siendo un país tan pequeño y con un recorrido histórico tan corto (en comparación con las naciones europeas), ¿hay material para realizar tantas publicaciones? ¿las temáticas te llegan fácilmente o te cuesta encontrar puntos de vista alternativos sobre los que profundizar en ciertos aspectos de las monedas?

Peso del Sitio de Montevideo
Peso del Sitio de Montevideo

J: He realizado artículos pero en menor cantidad de otros lugares, el primero que hice sobre numismática fue sobre monedas bizantinas y de ahí comencé a escribir más sobre lo propio. Mis dudas estaban sobre la historia que conocía o me habían contado de la numismática de mi país. Un día pude lograr obtener un permiso de investigador en la Biblioteca Nacional de Uruguay y de esto hace ya un poco más de veinte años. Ahí pude estar en contacto con los diarios del siglo XIX y comenzar la búsqueda, además de visitar otros archivos como Archivo de la Nación y otros lugares que también poseían diarios y documentos. Los temas pueden ser variados, no es sencillo, mis trabajos han sido escritos poniendo la fuente y la mayoría de ellos son los propios diarios y documentos los que cuentan la historia del tema elegido.

Siempre aparece algo más y muchas veces ha pasado luego de que has escrito e impreso algo alguna otra información surge  y esto daría para otro trabajo o ampliación del mismo. Pero se puede encontrar tal vez no para trabajos extensos pero si para artículos material jugoso y anecdótico haciendo muchas veces que el mismo sea atrayente. Todavía podemos en nuestro país buscar algo más de información no solo de monedas, sino también de papel moneda y medallas, esta última nombrada no tan estudiada o profundizada.

A: Como editor ¿es sencillo encontrar a autores dispuestos a colaborar? ¿cómo garantizas la calidad y veracidad de los artículos?

J: Cuando comencé como editor de la Revista Digital UNAN, cosa que fue por dos años, no fue sencillo encontrar personas que escribieran. Ahí tuve que recurrir a numismáticos amigos que se toman con seriedad su trabajo y que tenían mucha trayectoria en el ambiente. Al principio había que implorar un poco para que te mandaran esos trabajos. Pero al irse conociendo la revista ésta iba gustando al público, no solo por su contenido sino por la presentación de la misma. Esto último fue debido a la ayuda de un excelente amigo que hacía la parte digital y con gran capacidad para el armado y aporte de excelentes ideas, la revista atrajo considerable cantidad de adeptos. Esto hizo que muchos enviaran sus artículos para publicar y ahí nosotros los leíamos, revisábamos y las dudas que teníamos las preguntábamos e investigábamos. Muchos trabajos fueron rechazados porque la particularidad de la revista es que sólo aceptábamos artículos referentes a Hispanoamérica y otros fueron rechazados por no considerarlos serios. Personalmente, por medio de Internet, un poco atrevido de mi parte, le escribía a personas con trayectoria en la numismática. Para mi sorpresa logré que muchos de ellos mandaran sus artículos. Un ejemplo es Glenn Stephen Murray Fantom, ganador del Gran Premio Unión Europea de Patrimonio Cultural EUROPA NOSTRA 2009. Glenn desde hace mucho tiempo vive en Segovia (España), pero es especialista en monedas relacionadas con América y sus Cecas.

A: ¿Puedes recomendarnos alguna publicación (fácilmente accesible) para introducirnos en la numismática sudamericana en general, y en la uruguaya en particular?

J: Sí, por supuesto. En el siguiente link: www.monedasuruguay.com/

Variante de Sol De Cabellera

Se puede encontrar en su extensa biblioteca todos los boletines emitidos por Instituto Uruguayo de Numismática y su revista digital “El Sitio”, además de todas las revistas digitales de Unan Numismática, así como revistas de Argentina y Perú. Además de varios autores y documentos referentes a nuestro país.

A: Si quieres puedes añadir cualquier otra cosa.

J: Solamente agradecerte nuevamente esta oportunidad y desearte lo mejor para ti y el Blog Numismático, y demás está decirte que estamos a las órdenes.

Un gran abrazo.

1 comentario en “Entrevista a Javier Avilleira”

  1. Exelente entrevista, muy representativa del panorama del rio de la plata y para que tus lectores comnozcan otras realidades de lo que puede ser la numismatica. Se agradece.
    Saludos a todos

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