Una moneda limpiada por un profesional

En mi perfil de Facebook se publica un enlace a una entrada de este blog diariamente, de lunes a sábado. Lo mejor de esas «republicaciones» es que hay veces que se reabren debates que vuelven a ser interesantes años después de que la entrada original se hubiese publicado. Tal fue el caso del eterno debate de si limpiar o no la tierra de las monedas antiguas. Un debate que agité al volver a publicar esta entrada. Además de varios comentarios públicos hubo quien me hizo algún comentario en privado.

Tal fue el caso de Juan José Alcaide, un coleccionista más que experimentado en esto de la numismática antigua. Él me pasó fotografías de un sestercio de Claudio que tiene en su colección. Lo compró de manera que admitía más limpieza y luego lo envió a un profesional especializado en la limpieza de moneda antigua. No es un servicio barato pero, sabiamente, prefiere que una joya de este calibre esté en manos de un profesional. Así evitará desastres como éste. Aquí os dejo el antes y el después:

Antes de la limpieza:

semis Claudio Sin Limpiarsemis Claudio Sin Limpiar

Después de la limpieza:

semis Claudio Limpiado

semis Claudio Limpiado

semis Claudio Limpiado

semis Claudio Limpiado

Se puede observar que la moneda ha quedado muy bien, pero ha quedado en un tono bastante apagado. Digamos que la pátina de la moneda está «desnuda» y eso genera un color mate que puede no ser tan atractivo a la hora de fotografiarlo. Para evitar eso hay muchos comerciantes que dan una cera a la moneda. Esa cera proporciona más brillo a la pieza y hace que los relieves sobresalgan más. Pero otros coleccionistas, como Juan José, prefieren la pátina natural.

Ya que estoy, os dejo también un par de semis muy potentes que me ha mandado Juan José en esa misma conversación. El primero es un raro semis de Ecualacos en una conservación realmente extraordinaria. El segundo es el único semis conocido de la ceca de Évora. Ya veis el nivel que se gasta Juan José.

semis Ecualacos
Semis Ecualacos
semis Evora
Semis Evora
Semis Evora
Semis Evora

11 comentarios en “Una moneda limpiada por un profesional”

  1. Yago Abilleira Crespo

    Lo vi en persona con unos amigos arqueólogos. En una excavación apareció un dos maravedís de Carlos II que no había por donde cogerlo (sólo se veía parte del nombre del Rey). Luego la vi restaurada…baste decir que les dije que quería ver «la otra moneda», pensando que me enseñaban una distinta.

  2. Muy buena limpieza, la del sestercio de Claudio.
    En cuanto al Semis Evora, parece que ha habido un intento de retirada de tierra a derechas de la imagen, sin éxito alguno.

    En cuanto al anverso, se nota que ha sido limpiado (yo quitaría algo más de tierra, pero eso va en gustos). Por el tono obscuro o mojado de la tierra del anverso y algo de brillo del busto, parece que éste, sí ha sido cubierto por cera microcristalina…grandes piezas…

  3. Como todo, es cuestión de gustos.
    A mí me gusta mucho más cómo estaba antes de la limpieza, aunque al que le tiene que gustar es a su dueño. Lo importante es que daño no se le ha hecho.

  4. antonio carulla escanilla

    Para mi gusto encuentro mucho mas interesante la moneda de Claudio sin limpiar. Se ve como mucho mas auténtica y con unos bellos tonos. Una vez limpiada se ve con un aspecto monótono. Otra cosa es limpiar una moneda cuando está cargada de tierra que impide se vean los detalles.

  5. Buenas noches.
    Como bien decís, cuestión de gustos.
    Sin limpiar es muy bonita, pero para mi, limpia son como las prefiero. Por la sencilla razón de que las monedas circulaban y circulan «limpias», es una manera de acercarme a aquella época.
    Cuando las veo sin limpiar se me asemejan a piezas de museo(que muchas lo son) y pierden ese encanto al que me refiero de la época.
    Saludos.

  6. Adolfo Ruiz Calleja

    Ya veis que lo de limpiar o no limpiar es cuestión de gustos.

    Manolo, parece que esos semis de Évora no son exactamente iguales que el de Juan José: el reverso es diferente.

    Al igual que el otro día, esta entrada ha abierto un debate en el grupo de Facebook de We Are Numismatics. Aquí tenéis el enlace: https://www.facebook.com/groups/wearenumismatics/2378856715491906/

    Para quienes no estén dentro del grupo, podéis leer la conversación en esta imagen: https://s3-eu-west-1.amazonaws.com/blognumismatico/2019/05/04120208/conversacion.png

    Saludos,
    Adolfo

  7. Independientemente de que guste más limpita o con un poco de tierra… hay que reconocer un trabajo bien hecho. Espectacular.

    Las limpiezas a este nivel, ¿que son mecánicas o químicas (o las dos)?

    Saludos!

  8. Me he pasado por la captura de imagen que has puesto, Adolfo, para ver con los mensajes del foro.
    Esta moneda no ha perdido un ápice de su pátina, como vienen a exponer algunos en sus mensajes. Se ve claramente que conserva la pátina original.
    En ocasiones, lo bueno de que las monedas estén cubiertas de tierra, es, que el cospel no está directamente expuesto al oxígeno del ambiente… Es decir, esta tierra las protege de los agentes externos.
    Con la limpieza de esta moneda se puede destacar que quedan visibles partes con posible verdín (sobre todo el el canto)…y encima de la X de EXSC, hay un ligero picado, en cuyo interior sí se ve una pequeña corrosión…para mí, siempre es bueno, después de una limpieza, o sin limpieza, cubrir las monedas de cera microcristalina, sobre todo, a aquellas piezas en las que deseamos no se desencadene la enfermedad…en esta pedazo de pieza, un «por si acaso» estaría bien…ya que, aunque la pátina de todo el cospel se ve estable, yo no me atrevería a qué ciertas concreciones minúsculas, como las que he descrito anteriormente, con el tiempo, la vieran perjudicada.
    La cera cristalina puede tener un acabado mate o brillante… No necesariamente brillante… De hecho yo la he utilizado en partes de monedas de plata en las que puede existir un rayón contemporáneo que brilla demasiado y entorpece el aspecto general de la pieza.
    Es buena para la moneda, ya que hace de escudo frente a los agentes externos.

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