Otro par de días divertidos en Barcelona

Hoy es mi sexto día en Barcelona y será el último porque dentro de unas horas cojo un vuelo a Alemania para una reunión de trabajo. Lo que he hecho los primeros días ya os lo he contado: estuve en la presentación del libro sobre el vellón de los Austrias y luego disfruté como un enano en la subasta de Aureo y la convención de la ANE. Aquellos eran los platos fuertes pero todavía queda algo más.

Antes de que se me olvide, un paréntesis: a primera hora en la convención de la ANE robaron a un comerciante unas onzas de mucho valor. El total es de unos 80.000 euros robados. Me han pedido que dé difusión a la lista de monedas que se tratan por si acaso a alguien se las ofrecen. Aquí la podéis ver. Son piezas muy raras; espero que esos hijos de puta desalmados al menos no las fundan.

El caso es que el sábado me lo tomé libre numismáticamente hablando y el domingo me fui a la Plaza Real a ver el mercadillo de monedas que se monta por las mañanas (dos primeras fotos). En este caso, más que un mercadillo numismático o filatélico es un mercadillo del coleccionismo. Había varios puestos con antigüedades y con chapas de cava pero me sorprendió que los puestos con monedas no pasesen de 10 ó 12, de los cuales no había más de 3 que pudieran tener algo medianamente serio. Lo que más me gustó de la Plaza era lo cómodo que se estaba en ella, ya que los puestos estaban distribuidos en toda la Plaza Real y hay espacio suficiente como para que no haya aglomeraciones (en la Plaza Mayor de Madrid hay veces que hay que ir empujando a la gente). También me llamó la atención que había varios corrillos de coleccionistas que intercambiaban sus repetidas aunque estos corrillos se centraban más en las chapas de cava -al parecer muy coleccionadas por aquí- que en las monedas.

En la Plaza Real me pararon dos comerciantes. Uno de ellos era el responsable de Monedalia y otro era Xavier Arce, presidente del Cercle Filatèlic i Numismàtic de Barcelona, con quien ya había coincidido el año pasado. Estuve un rato intercambiando impresiones con ellos y no tardé mucho en despedirme porque había quedado con una amiga para ir al Mercado de Sant Antoni, donde se ponen un montón de libros de seguna mano.

¡¡Ese mercado sí que estaba a rebosar!! (fijaos en la siguiente foto) Además de que la estrechez de los pasillos tampoco ayudase nada. Había decenas de puestos clónicos con libros de segunda mano que no me decían gran cosa pero que al parecer al grueso de los asistentes sí. También era curioso la cantidad de revistas y vídeos porno de segunda mano que había. Nunca me imaginé que se pudiera comercializar algo así, pero en ninguno de esos puestos faltaba algún viejete curioseando; supongo que a estas alturas ya habrían perdido cualquier tipo de vergüenza.

En ese mercadillo había algunos puestos con personalidad que se centraban en temáticas más específicas. Algunos eras de cómics, otros de objetos de los años 50… esos me llamaban más la atención. Un par de ellos tenían acciones antiguas y otros documentos e incluso encontré un puesto de monedas. El típico puesto que llama EBC a las monedas que están en MBC- (no exagero) y cuyos comerciantes no tienen la más pajolera idea de numismática.

Pasando rápido las hojas de sus álbumes me encontré la siguiente pieza descrita como una «prueba de 50 centavos de Manila»; pedían por ella 85 euros (un precio razonable en este caso). En realidad no era más que una prueba de la maquinaria de acuñación de Franco usada para probar la acuñación de los cantos. Es bastante corriente. Les pedí que me dejasen fotografiar la moneda y me dijeron que sí, advirtiéndome que esa moneda «es única y no la tienen más que ellos porque él la ha descubierto y es inédita». Por el tono me hizo sospechar que quizá él se creyera realmente lo que estaba diciendo.


El lunes por la tarde siguió la visita numismática por Barcelona pasándome primero por Aureo. Para entonces ya estaba la cosa calmada en esa empresa pero debieron tener un viernes horribilis por un error informático que afectó a la subasta y que tuvieron que resolver lo antes posible. Ese error formó un revuelo terrible en los foros pero mi opinión es que el problema no fue tan grave y que se actuó de buena voluntad, como casi siempre hacen las personas.

Luego me fui a la ANE a ver a unos cuantos colegas. Eso de ir sin previo aviso a una asociación, a una convención o a un mercadillo y conocer a gente con quien pasar un rato agradable es algo que me encanta. Yo creo que es por haber vivido toda mi vida en una ciudad pequeña donde entras en casi cualquier bar y no falta alguien a quien saludar o con quien tomarte una caña.

Finalmente pasé por el Cercle Filatèlic i Numismàtic de Barcelona (dos últimas fotos), donde me había invitado Xavier el día anterior. Allí no había ido antes y me sorprendió muy gratamente en varios aspectos. El primero fue su hospitalidad puesto que era la primera vez que me dejaba caer por allí y me sentí como en casa. El segundo fue que había bastante movimiento: éramos media docena de personas en el local, lo que no está nada mal para ser un lunes por la tarde. Me dijo Xavier que los martes suelen quedar varios coleccionistas de monedas para intercambiar piezas, por si alguien se quiere acercar. Y el tercer aspecto a subrayar es su impresionante biblioteca, que se empezó a forjar en el año 1924, cuando se fundó la asociación.

Con esto pongo fin a otra muy buena visita numismática-festiva a Barcelona. La verdad es que me lo paso genial por aquí.

12 comentarios en “Otro par de días divertidos en Barcelona”

  1. El mercado de Sant Antoni es mi preferido :)
    El sábado podrías haberte acercado al mercado de Sabadell, que hay dos o tres puestos de numismática que no estan mal.

    Por cierto, debíste haber comprado los 50 céntimos de Manila, a 45º el reverso no son fáciles de encontrar ;)

    un saludo,

  2. Hola a todos: la Ciudad Condal tiene bastante animación numismática. Parece que Madrid y Barcelona son las dos capitales españolas con más casas especializadas, asociaciones, mercadillos, aficionados, ambiente…en casi todo y también en lo numismático. (Aunque no sean los únicos en España, claro).
    Por cierto, el robo en la convención de Barcelona ya muestra el nivel de los participantes. Gracias, Adolfo, por compartir el paseo y tus impresiones con nosotros. Y, espero que el comerciante y la numismática puedan recuperar las monedas robadas; los escudos tenían que ser una maravilla.

  3. Bueno Adolfo, después de la sana discusión en los foros, me alegro de que te lo pasaras bien en la Ciudad Condal.
    Me gustaría, si puedes, que comentaras lo que sepas sobre las adjudicaciones del Estado en la Subasta de Áureo. Yo personalmente no concía algunas de estas monedas. El cuarto de Pirral, me parece sublime y las medias blancas de Juan I, también.

    Desde que empecé a coleccionar «seriamente» (hace no mucho tiempo, todo hay que decirlo), tengo tu blog en referencia, pues he aprendido muchísimo con él. Sirva también mi post para tirar pelillos a la mar sobre el citado «revuelo», que en ningún momento fué con «segundas» intenciones, ni mucho menos. La finalidad era comentar e intercambiar diferentes puntos de vista sobre lo sucedido.

    Ya sabes, puedes volver a Barcelona siempre que quieras ;)

    ¡Un saludo!

    1. Sé que tus críticas no son con mala intención, pero siempre hay quien aprovecha para intentar desacreditar gratuitamente.

      Vuelvo a decir que yo con Áureo no tengo más que una relación de cordialidad y soy cliente de la empresa. Ni tengo acciones, ni trabajo allí, ni me deben nada. Si se cae la empresa mañana, yo no pierdo un duro. Si multiplican su beneficio por 100 a mí no me darán nada.

      Saludos,
      Adolfo

  4. Hola,aparte de todo me quedo con los que aprovechan para desacreditar,pero ten mas cuidado con los que no hablan por delante,no soy quien para ensenarte nada pero la envidia es muy mala y hace ser al hombre un analfabeto que se convierte en ignorancia para llegar a ser desconfiado y mala gente,un saludo y cuidado con los brazos por el hombro de algunos.

    1. Ángel, no sé si Adolfo será capaz de entenderte, pero yo tengo que confesar que no.
      No te lo tomes a mal, pero tu mensaje ha sido más críptico que las profecías de Nostradamus. jejejeje

      1. Hola,pues no tiene nada de critica,decia que he visto tanto en otro foro como aqui un pequeno desacuerdo en puntos de vista por parte de Adolfo y Pavofrito,pienso que no tiene importancia.
        Le decia a Adolfo que es peor los que se callan y los que utilizan esto para desacreditarle que los comentarios de Pavofrito.
        He visto comentarios en otro foro realmente nefastos,que no se como los modetadores no lps han quitado.
        Simplemente era un consejo hacia Adolfo,el sabra muy bien defenderse pero son cosas que el que mas y menos lo hemos pasado y sienta mal ,vamos un poquito de animo si lo ves asi.
        A lo mejor no he sabido decirlo,saludo y espero sinceramente que no lo comprendais,no soy de los que critica cosas que no se.
        Para terminar estos mercadillos los echo de menos por estos lares.

  5. Hola a todos: por curiosidad, Adolfo o alguno de vosotros: ¿sabe cómo fue el robo de las onzas? ¿El ladrón se las llevó del puesto sin ser visto? ¿Había vigilantes a los que pudiera acudir el comerciante?….

    1. En las convenciones hay seguridad, pero en este caso debieron coger una cartera donde estaban las monedas y salir del edificio antes de que el dueño se diera cuenta.

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