Gros de Carlos el Noble

gros Carlos el Noble

Periodo: Edad Media

País: Reino de Navarra

Denominación: Gros

Reinado: Carlos III, el Noble

Ceca: Pamplona

Calidad: EBC

Peso: 3.29 g.

Casa de subastas: Aureo & Calicó

Fecha: 12 de marzo de 2020

Precio de salida: 3.000 euros

Las monedas de Carlos el Noble

Carlos III de Navarra, que pasaría a la historia como Carlos el Noble, heredó en 1387 un reino en una situación francamente difícil. Su padre, Carlos II «el Malo», se había enemistado con todo el mundo y le salían problemas por todas partes. Tuvo conflictos con Francia, con Aragón y con Castilla. Salió malparado de prácticamente todos ellos, lo que arruinó Navarra y provocó revueltas internas.

Esta desastrosa situación fue reconducida por Carlos el Noble. Durante su largo reinado -entre 1387 y 1425- buscó las relaciones diplomáticas, financió el Estado, construyó castillos y consiguió reconducir su reino a la prosperidad. Bien podría pensarse que un largo reino y un gran auge económico traería como consecuencia una abundante producción numismática. Pero fue todo lo contrario. La razón es que durante sus primeros años de reinado, Carlos el Noble acuñó moneda de baja ley, que es el clásico truco fácil de los monarcas para financiar el Estado. En 1390 la nobleza, viendo la inflación consecuente a esta disminución de la pureza del metal, acordaron pagar 30.000 florines al rey para que nunca más acuñase moneda. Y así se hizo. Por lo tanto, a pesar de que su reinado fue muy largo, Carlos el Noble solo acuñó monedas entre 1387 y 1390.

Es de esperar que en esos primeros años de reinado se reutilizasen cuños existentes de Carlos el Malo. Además, al tener padre e hijo el mismo nombre, en algunos casos no es fácil saber por sus leyendas a quién de los dos pertenecía cierta emisión. Por eso nos comenta Crusafont que algunas monedas atribuidas a Carlos el Malo podrían ser de Carlos el Noble. Pero las únicas que se dan por seguras de haberse emitido en esos tres primeros años de su reinado son las de un gros y medio gros como la que se muestra en esta entrada (de estas monedas hablamos aquí y aquí). Son contados los ejemplares que nos han llegado.

A pesar de todo esto, y por sorprendente que parezca, el legado numismático de Carlos el Noble es muy importante. Esto se debe a que el mismo Carlos era coleccionista de monedas. Ha llegado una relación de las monedas que poseía el monarca. Esta relación nos la muestra Pellicer en la Sección 2.9 de este documento (20MB, pero recomiendo encarecidamente a todos los interesados en la moneda navarra que lo descarguen y lo lean con calma, así como los artículos de Miguel Ibáñez Artica). Podemos ver que entre las monedas se encontraba la dobla de 10 doblas de Pedro I de Castilla, hoy en el MAN. De hecho, ésta fue un regalo de su padre.

Y digo yo que alguien que regala a su hijo semejante moneda no debería pasar a la historia como «el Malo».

Precio de un gros de Carlos el Noble

No hay más que buscar en acsearch o en el buscador de Áureo para ver que encontramos muy pocos ejemplares de Carlos el Noble. Son monedas realmente raras, así que quien quiera incorporar una pieza de este monarca a su colección va a tener que rascarse el bolsillo. Tanto es así, que un ejemplar agujereado fue rematado por 1.200 euros el año pasado.

Si buscamos otro ejemplar, encontraremos éste que ha salido varias veces a subasta por 5.000 euros y no ha encontrado comprador. Ahora bien, yo creo que el que sale ahora a subasta es todavía más bonito, por lo que probablemente merezca esos 5.000 euros de remate que no se quisieron dar por el otro. Otra posible referencia es el medio gros de Carlos el Noble que se remató en 4.000 euros. Los medio gros son todavía más raros que los gros, pero al ser el «hermano pequeño» tienen menor demanda (pasa esto mismo con muchas monedas). Pero lo que parece indicar este remate es que hay coleccionistas dispuestos a gastarse varios miles de euros en una plata de Carlos el Noble. Más todavía ahora que la moneda medieval se ha puesto de moda.

Sobre la subasta Selección de Áureo & Calicó de 2020

Como cada mes de marzo, y coincidiendo con la Semana Numismática de la ANE, Áureo & Calicó organiza una Subasta Selección. Esta subasta se compone de 500 lotes en los que se saca lo mejor de cada serie. Son monedas exquisitas, del máximo nivel de cualquier serie. Esto no significa que tengan que ser todas necesariamente caras (aunque no suelen salir baratas), sino que son monedas de muy alta calidad. Generan tanta expectación que la subasta se ha comentado hasta en la prensa generalista. Yo recomendaría a todo el mundo echar un vistazo al catálogo porque es un auténtico deleite.

En mi última visita a Barcelona tuve la ocasión de ver en mano esta colección. Entonces grabé tres vídeos que aquí os dejo (enlace a Facebook del primero, del segundo y del tercero):

 

 

Además, Áureo organiza otra subasta en sala con casi 600 lotes. Hay piezas muy interesantes de todas las épocas, como los áureos de Alejandro Severo (uno y dos), el dínar de la Taifa de Mallorca o los 4 escudos madrileños de Felipe II. Sin embargo, hay muchas monedas potentes que no se suelen ver en las subastas españolas y que, claramente, tienen más mercado fuera que dentro de nuestras fronteras. Un ejemplo es el centavo de 1794 o los cobres irlandeses de principios del XIX. También hay oros potentes de Portugal y Brasil, así como piezas rusas realmente sorprendentes: los 5 rublos de Isabel y los de Catalina, varias medallas militares e incluso una cigarrera. Pero también hay una muy buena representación de los Austrias y, sobre todo, de los Borbones. Eso garantizará el interés por esta subasta en España.

En Imperio Numismático también están comentando esta subasta.

Descripción de Áureo & Calicó

Carlos el Noble (1387-1425). Navarra. Gros. (Cru.V.S. 251) (R.Ros 3.15.1) (V.Q. 5653, mismo ejemplar). 3,29 g. Bella. Muy rara y más así. EBC.

Fuente

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Comentarios en: Gros de Carlos el Noble

  1. Hola.
    Gracias por los comentarios. Muy interesante.
    Mencionas que «la moneda medieval se ha puesto de moda». ¿Te refieres a la moneda medieval en general o concretamente a la castellana?

    Saludos

    1. Adolfo Ruiz Calleja

      La medieval en general y la castellana en particular.

      Lo que pasa es que la moneda medieval castellana estaba totalmente olvidada hace 5-8 años. Por eso el «subidón» ha sido mucho más pronunciado.

  2. Adolfo Ruiz Calleja

    Ya sabes que la política general que sigo en este blog es utilizar la terminología que se suele utilizar en el mercado numismático. En muchos casos, esta manera de referirnos no es la adecuada desde el punto de vista histórico. Por ejemplo, decimos «dinero de seis líneas» en vez de «dinero de la Guerra de Granada», o cosas así.

    En este caso, uso la voz «gros» porque es como las empresas y los aficionados se suelen referir a esas monedas. Esto coincide con la definición de la RAE y es un calco de la voz germana «gross». Si desde el punto de vista histórico o no es adecuado, la verdad es que no lo sé. No sé si en el siglo XV los navarros utilizaban «gross», «gros» o «grueso» para referirse a esas monedas.

    Volviendo a tu pregunta original, yo no sé por qué usamos la voz «gros» para referirnos a estas monedas; al igual que tampoco sé por qué usamos otras muchas voces a diario y no me paro a hacer un estudio etimológico para cada una de ellas. Lo que sí sé es por qué yo escribo «gros»: porque es como los coleccionistas nos solemos referir a estas monedas. Igual que digo «dinero de seis líneas» a pesar de ser plenamente consciente de que históricamente no es correcto.

    Saludos,
    Adolfo

  3. Si nos vamos a poner puristas…
    Partamos de la base de que muchas de las monedas actualmente las conocemos por los motes coloquiales con los que eran conocidas (cornados por el busto coronado del monarca, blanca por el color de la propia moneda. dineros prietos por el mismo motivo…).
    Otras monedas imitaban en contenido metálico a otras que eran apreciadas en el comercio internacional como los florines y ducados venecianos o los dinares musulmanes…
    Y si nos retrotraemos al bajo imperio romano, simplemente no tenemos NI IDEA de cuales eran los nombres por los que eran conocidas las diversas monedas y nos basamos en citas literarias confusas de las que no está claro cual moneda era cual…
    Encima algunos de los motes «modernos» con los que las conocemos simplemente están errados como en el caso de las famosas «puertas de campamento» (en inglés «Camp gates») y que realmente representan algunas de las numerosas torres de vigilancia que jalonaban todo el Limes que separaba el Imperio de los bárbaros y que discurría desde el Mar del Norte hasta el Mar Negro…
    Si nos ponemos puntillosos los «duros de plata» no tienen sentido pues es un mote popular derivado de su nombre «oficial» «peso fuerte de a ocho reales»…
    En definitiva, los distintos lenguajes sirven para entendernos a poco que pongamos buena voluntad y para enfrentarnos si la voluntad es mala…
    Tengamos todos buena voluntad y disfrutemos juntos de nuestro «vicio» común.

  4. P.D.
    En la edad media «prieto» significaba «oscuro», «negro»…
    Los dineros prietos se llamaban así porque los cospeles no fueron blanqueados antes de la acuñación como era habitual.

  5. En cuanto al término «grosso»…
    Cuando Carlomagno creó el Imperio Carolingio, este pretendía ser una restauración del Imperio de Occidente aunque con sus características propias.
    De este modo el denario romano resucitó en la forma del «dinero» carolingio acuñado con un peso y ley estable en todas las cecas del Imperio.
    El problema vino cuando Carlomagno murió y sus hijos siendo benevolentes diremos que no se mostraron ni de lejos a la altura de su padre ni en lo político, ni en lo militar y mucho menos en lo económico.
    De este modo surgió una miriada de pequeñas y descontroladas cecas que abusaban del privilegio de emisión acuñando monedas cada vez de peor ley y peso hasta el punto de que la estabilidad del dinero Carolingio se convirtió en un recuerdo en lo que era la Europa continental.
    Falta de plata las monedas cada vez eran peores aunque la desaparición del comercio «internacional» hizo que esto no se notase demasiado…
    A finales del siglo XII se descubrieron en la actual Hungría unas importantes minas de plata lo que aumentó la provisión de plata en toda Europa y muy especialmente en las ciudades comerciales de Italia. Así, cuando Venecia hubo de equipar en 1.202 una flota para trasladar a los cruzados a Tierra Santa dio salida a sus reservas de plata acuñando una nueva moneda de plata casi pura y de 2,2 gramos (los dineros normales pesaban entonces un tercio de gramo y de vellón bajo).
    Su nombre oficial era «ducatus argenti», aunque rápidamente fue conocida por los cruzados como «Gros», «Grosso» o «Matapán».
    La moneda se hizo sumamente popular siendo imitada en toda Europa y convirtiéndose «de facto» en una moneda de comercio y facilitando el resurgir de este en toda Europa.

  6. Adolfo Ruiz Calleja

    Estaría bien hacer un glosario de términos un poco extendido, de tal manera que se muestre qué términos son creados por la comunidad numismática, cuáles tienen una raíz histórica, cómo eran conocidas las monedas en su época original… Sería un trabajo muy interesante que daría para un libro la mar de curioso, aunque con pocas expectativas de ventas.

    Para mí lo más interesante de todo es que esto muestra que la comunidad de coleccionistas ha generado y desarrollado su propia jerga. Al igual que toda comunidad que se precie :-)

  7. «Ser un pesetero» o «Ser un chusquero» eran expresiones despectivas que usaban los soldados carlistas en Cataluña para referirse a los soldados isabelinos pues estos recibían diariamente una peseta y un chusco de pan de tres libras de peso que se podían llevar a casa…
    «estar sin blanca», «no tener un real», «estar sin un duro», «estar sin un cuarto», «Se me da o me importa un ardite» son todas expresiones numismáticas que usan distintas monedas…
    «duro», «pela», «chavo», «ochavo», «cuarto», «blanca», «cornado», son todas apelaciones populares a distintas monedas…
    «calderilla» hace mención a moneda de poco valor desde los tiempos de los últimos Austrias que eliminaron la plata de sus acuñaciones menudas que hasta entonces eran de vellón por lo que estas monedas dejaron de ser negruzcas para ser de puro cobre y con un aspecto tan asquerosillo tras sufrir varios procesos de resellado que la gente decía que estaban hechas con calderos viejos…
    «calderilla catalana» hace mención a la moneda menuda que circulaba por Cataluña tras la introducción de la peseta en 1869 y que costó Dios y ayuda retirar de la circulación

  8. Si, la moneda medieval está de moda y como los comentarios van por la vía de afinar denominaciones, deberemos decir que la que más de moda está es la moneda medieval leonesa, y después la castellana y leonesa. Urraca era reina de León y Castilla, al igual que su hijo Alfonso VII (de ambos muestras 2 preciosas piezas en tu video sobre la subasta) coronado emperador en la antigua Catedral de León, capital del Reino y «caput spaniae» como reza uno de sus denarios o dineros acuñados a su nombre.
    Hago estas precisiones porque siempre que te refieres a la moneda medieval de esta época hablas de «castellana» «olvidando» al Reino de León. (Será porque eres de Palencia? Jjjj)

    1. Adolfo Ruiz Calleja

      Rafa, ya sabes que tengo mucho cariño a León. Me han tratado muy bien allí :-)

      Cuando hablo de manera general, digo «moneda castellana» para referirme a la moneda de Castilla y de León, tanto como reinos independientes como después de su unificación. Igual que cuando hablo en general digo «moneda de la Corona de Aragón» y ahí también englobo las monedas de los condados catalanes antes de su incorporación a la Corona de Aragón. Cuando entro en más detalles es cuando lo distingo.

      Saludos,
      Adolfo

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