Las imitaciones indias de los ducados venecianos

El ducado veneciano es por todos conocido (Figura 1). Es una moneda de oro de 3,5 gramos y una pureza de 23 ¾ quilates (98,96%). Se comenzó a acuñar en Venecia en 1284 y su fama pronto se extendió por Europa. Al ser una moneda estable acabó desbancando al florín como moneda preponderante en el continente y su metrología acabó siendo imitada por otros países hasta entrado el siglo XX. En España las imitaciones más conocidas son el ducado de la Corona de Aragón y el excelente castellano.

Ducado veneciano. Andrea Contanni (1368-1382)
Figura 1. Ducado veneciano. Andrea Contanni (1368-1382)

Estos ducados representan en su reverso al dogo veneciano arrodillado delante de San Marcos. En su anverso aparece la imagen de Cristo. Es un motivo religioso profundamente relacionado con la ciudad de Venecia, como comentamos en una entrada anterior.

Lo que es menos conocido es que estos “zecchinos” también circularon fuera de Europa. No es de extrañar si tenemos en cuenta la enorme importancia que tuvo la República de Venecia en la ruta de la seda. Así, el oro veneciano circulaba hacia el este para traer valiosas mercancías de los confines de Asia. 

Imitación india de un ducado veneciano.
Figura 2. Imitación india de un ducado veneciano.

En muchos casos ese oro cruzaba el Mediterráneo hasta Egipto, luego se adentraba por la Península Arábiga y de ahí cruzaba el Índico hasta el sur de la India para, después, llegar a China o al Sudeste Asiático. Lo que parece sorprendente es que estos ducados venecianos llegasen en suficiente cantidad como para tener un gran impacto social en Asia. Concretamente, en la costa suroeste de la India (en Kerala, Karnataka y Maharashtra) se ha estudiado la presencia, el uso y la imitación de los ducados venecianos.

Los ducados venecianos debieron llegar en suficiente cantidad como para llamar la atención a la sociedad india, a pesar de que apenas circularon. Los indios seguramente vieron en esos ducados unas monedas cuyos motivos no entendían pero admiraban. El atractivo de lo exótico. Pronto las debieron de utilizar para la ostentación, colgándolas en los Putali haars (collares donde se sueldan putalis, que son chapitas o monedas de oro, o al menos doradas; en la zona sur les llaman “sanar kasu”) junto con otras monedas locales. Esos putalis generalmente representan deidades hindúes, como Lakshmí, Rama, Sita o Krishna.  Pues ahí, entre todas estas deidades, los orgullosos indios colocaban un ducado que representaba a Cristo, a San Marcos y al dogo veneciano.

Imitación india de un ducado veneciano.
Figura 3. Imitación india de un ducado veneciano.

El simple hecho de que deidades cristianas compartan espacio con otras hindúes es algo que, ya de por sí, sorprende a nuestra mentalidad monoteísta occidental. Pero cualquiera que haya viajado por la India se dará cuenta de que allí no supone un problema. Un hindú  no tiene problema alguno por participar de un oficio religioso musulmán o católico. De hecho, mientras que se montó un enorme conflicto en Ceuta por permitir la entrada de Ganesha a la catedral, en los templos hindúes es posible ver imágenes de Cristo y de la Virgen María. De la misma forma, un hindú no tendrá reparos en portar a Cristo al lado de Visnú.

La demanda de ducados venecianos para ser utilizados como putali debió de ser alta. Tan alta que pronto fueron imitados por los orfebres locales (Figuras 2-5). En un principio, estos orfebres buscaron una imitación razonablemente fidedigna (Figura 2) que luego fue degenerando (Figura 3). Finalmente, reinterpretaron los ducados venecianos con sus propios símbolos culturales (Figura 4 y 5). Así, mientras que la posición de los elementos permaneció estable, la iconografía de los mismos cambió. Y esto ocurrió hasta el día presente, pues todavía hoy se pueden encontrar a orfebres en los mercados de Maharashtra acuñando imitaciones de los ducados venecianos para ser usadas como putalis. Eso sí, en muchas ocasiones son de cobre

Imitación india de un ducado veneciano, siglos XVIII - XIX. Laksmí en el anverso y Rama y Sita en el reverso.
 Figura 4. Imitación india de un ducado veneciano, siglos XVIII – XIX. Laksmí en el anverso y Rama y Sita en el reverso. Fuente.

Las dos figuras del reverso se suelen interpretar en Maharashtra como Radha y Krishna bailando Darga (Figura 4). En Mangalore y Malabar se les interpreta como Sita y Rama con un cocotero entre ellos, más (¿Figura 5?). Más sorprendente es la interpretación del suroeste de la India, donde a al dogo se le cambia por un hombre agazapado preparándose para trepar un cocotero.

En cuanto al anverso, la figura de Jesucristo se cambia por Vithoba, Krishna o Laksmí. Siempre en una especie de posición mayestática.  

Por último quisiera decir que estos ducados venecianos no fueron las primeras monedas itálicas en ser imitadas en el suroeste indio. Antes llegaron los denarios y los áureos romanos, que también fueron reinterpretados por los monederos locales.

Imitación india de un ducado veneciano. ¿Sita y Rama con un cocotero en el anverso y Laksmí en el reverso?
 Figura 5. Imitación india de un ducado veneciano. ¿Sita y Rama con un cocotero en el anverso y Laksmí en el reverso?

Tenéis más información en estos enlaces: uno, dos, tres y cuatro

En podcast

Os dejo un podcast con un contenido semejante al de este artículo:

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