El resello sufragista

Para hoy os dejo un texto que ha escrito mi colega Alejandro Lascano. Muchos le conoceréis porque es muy activo en las redes sociales y porque ha escrito otros textos como este magnífico catálogo de duros del siglo XIX. Sin más os dejo con el artículo. Suyo es el texto y míos los enlaces.

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A principios de 2010 se crea una nueva exposición en el British Museum de Londres (más en el blog). Es una exposición con muchas expectativas, tanto que la complementan un programa de radio y un libro, que comparten título con la exposición: “A History of the World in 100 Objects”. Uno de los objetos destacados por el famoso museo es una moneda, pero no se trata de una moneda antigua, ni de ninguna moneda rara, ni si quiera está hecha de ningún metal precioso. Se trata de un simple penique inglés de principios de siglo XX (primera imagen), pero eso sí, con una grandísima carga histórica grabada en él.

penny VOTES FOR WOMEN

El movimiento sufragista se empieza a hacer oír en Inglaterra sobre 1820, aunque todavía en la década de 1880 solo el 60% de la población inglesa tiene derecho a votar. En esa fecha es cuando se intensifican las protestas para que el derecho al voto sea extensible a la población femenina. Pero no será fácil tarea, ya que la sociedad británica y su clase política, famosas por su conservadurismo no cederán a estas propuestas hasta muchos años tarde.
Las protestas de las sufragistas fueron en aumento con el tiempo, tanto en cantidad como en contundencia. Empezaron con el reparto de panfletos, pequeños mítines improvisados a pie de calle y manifestaciones cantando el himno sufragista, lo que provocó pequeños altercados. Para comienzos del siglo XX el movimiento sufrió una radicalización importante, en la que damas de intachable reputación eran detenidas por romper escaparates de tiendas o encadenarse a la valla de la casa del primer ministro entre otros actos. Las mujeres encarceladas se ponían en huelga de hambre y Emily Davison perdió la vida en 1913 en el Derby de Epsom al ser arrollada por un caballo mientras pedía el voto para las mujeres. En este clima de agitación las palabras del Ministro Gladstone no ayudaban en absoluto, ya que clamaba que el sitio de la mujer estaba en la casa, ocupada con sus quehaceres diarios.

Fue en 1903 cuando se data la primera moneda resellada con el lema de las sufragistas, esto concuerda con el comienzo de la radicalización del movimiento sufragista. Recordemos que por el acta de 1853 se prohíbe tanto la manipulación y deformación de las monedas circulantes, dicho acto las invalida para el curso legal, convirtiéndose en delito el acto de resellar las monedas de un penique para publicitar el movimiento, que por otro lado, era lo que precisamente buscaban las sufragistas, darse a conocer y a la vez realizar un acto de desobediencia contra el gobierno. Resellar las monedas de cobre de escaso valor tenía por objetivo que el mensaje escrito en la moneda se moviera de mano en mano y llegara al mayor número de gente posible, lo que nos hace reflexionar sobre el poder comunicativo que pudo tener el resellado de moneda en épocas pasadas.

Las monedas que portan este resello son monedas de un Penique inglesas con la efigie de Eduardo VII y Jorge V, fechadas en los primeros años del siglo veinte. Dichas monedas portan el motivo VOTES FOR WOMEN en letras grabadas por punzones individuales, de 4 mm de alto cada una. Los punzones tienen un estilo simple, pero con adornos en los extremos de las letras, que concuerdan con el estilo usado en la tipografía de la época. El resello siempre está formado por tres líneas, una para cada palabra y puede encontrarse tanto en el anverso como en el reverso de la moneda, según se ha podido estudiar en los pocos ejemplares que han llegado a nuestros días.

Como hemos podido ver y para hacernos una idea de la gran carga histórica que tiene esta simple moneda, llegó a formar parte de una importante exposición en el prestigioso British Museum y ha sido recogida en una recopilación dedicada a los resellos políticos -aunque desgraciadamente inacabada- que se publicaba en fascículos a través del Numismatic International Bulletin. Esta es la historia de una pequeña moneda de cobre que porta un mensaje con una enorme carga comunicativa y de cómo se convierte en el mejor medio de transmitir una idea y calar en el pensamiento colectivo de la sociedad. Y para conmemorar los cien años del resellado del penique sufragista del British Museum, se dedicó el reverso de la moneda de 50 pence del año 2003 a este hecho, mostrando al encadenamiento de una sufragista en el número 10 de Downing Street (segunda imagen y aquí otros 50 pences conmemorativos).

50 pence VOTES FOR WOMEN

Para los coleccionistas que busquen este resello, tengo que decir que tienen que andar con pies de plomo, pues existen multitud resellos falsos de manufactura reciente que están aplicados sobre monedas originales. La manera más fácil de detectarlos es comparar el estilo de las letras del resello, que tienen un acabado recto y sin adornos. También han aparecido recientemente monedas con mensajes referentes a la abolición de la esclavitud o de apoyo a las sufragistas hechas con los mismos punzones que los resellos falsos sufragistas. Entre dichos motivos se pueden encontrar “NOT TO SLAVERY” y “EMILY / SHE DIED FOR OUR VOTE”, pero aparecerán más con el tiempo, con el único objetivo de engañar al coleccionista y hacer dinero fácil, así que ¡mucho cuidado con ellos!

Bibliografía consultada:

A History of the World in 100 Objects, Neil MacGregor (Penguin Books Ltd, 2012)
British Countermarks on Copper & Bronze Coins, J. Gavin Scott (Spink & Son Ltd, 1975)
Coins Countermarked with Political Messages and Related Pieces. Catalog: Part U (United Kingdom) Gregory G. Brunk (NI Bulletin Vol. 48 Nos 5/6)
Suffragette-defaced penny

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Dejo otro ejemplar auténtico:

VOTES FOR WOMEN

Ahora unos cuantos falsos:

resello falso

resello falso

resello falso

resello falso

resello falso

resello falso

resello falso

resello falso

1 comentario en “El resello sufragista”

  1. Simple y llanamente estupendo. Este es un buen ejemplo para esos que nos critican por la espalda. Aprendes historia, movimientos sociales y encima te quedas con un cachito de todo aquello que ocurrió.
    Un articulo cojonu…..

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