Muy baratas porque tengo muchas

Hace unos tres años quedé con un lector del blog (llamémosle Enrique) en el mercadillo de Madrid para tomar una caña. Resulta que Enrique tenía una colección muy humilde que quería regalar a su nieto y estaba bastante contento porque había conseguido algunas piezas «raras» a «buen precio» justo antes de jubilarse, momento en el cual dejaba de coleccionar por cuestiones económicas. Tan contento estaba con las compras y con mi visita que me llevó las mejores piezas de su colección para que las viese. Entre ellas estaba una peseta de 1947*56 en MBC+, las 50 pesetas de 1984 SC y un flamante paquillo de 1966 (19-69) palo curvo, que era la estrella de su colección.

Llegados a este punto, y aún sin haber visto ninguna moneda, a cualquier lector del blog deberían saltarle todas las alarmas (a Enrique se lo perdonamos porque estábamos en los albores del blog). Lo primero que suena rarísimo es que se puedan conseguir en un mercadillo piezas raras a buen precio. Lo segundo es que la «pieza rara» no es que sea rara, sino que es una moneda muy comercial y además muy falsificada. Lo tercero es que chirría mucho que en una colección haya una pieza que triplique el precio del resto de monedas: sea cual sea el valor de la colección no es normal que alguien que se ha gastado como mucho 40 euros en una moneda, se vaya a dejar los 120-150 que cuesta un palo curvo.

Entonces es cuando cogí el paquillo, lo miré y aquello era clarísimamente falso. Le pregunté que dónde lo había comprado y me dijo que a uno de los vendedores de la Plaza Mayor. «Un tipo muy majo que tenía un cartucho entero de 100 pesetas con el palo curvo y por eso me la vendió muy barata. Me salió por 30 euros, y menos mal porque si no yo no podría habérsela comprado a mi nieto».

En aquel momento dudé en decir: «¿¡Pero cómo te has creído esa milonga!?», pero no me atreví y no dije nada. El hombre estaba todo ilusionado con la moneda y con regalársela a su nieto el día de mañana. Por otro lado, Enrique ya no iba a comprar más piezas y a estas alturas el vendedor iba a decir que aquella moneda no había salido de sus manos. Así que dejé el timo como estaba y ya se enterará el nieto de Enrique dentro de unas cuantas décadas que a su abuelo le engañaron.

Pero el timo ese de: «esta moneda es muy buena/rara/cotizada pero te la dejo muy barata porque tengo muchas» ya lo he oído varias veces. Otro clásico, pero de semejante naturaleza es: «esta moneda es muy buena/rara/cotizada pero te la dejo muy barata porque ando sin un duro y me hace falta liquidez». No tiene sentido, un comerciante por muchas monedas iguales que tenga, o por mucho que le haga falta el dinero, nunca va a tirar los precios de esa manera. Nunca jamás.

Cuando se compran lotes de monedas iguales se suelen pagar más baratos que si se compran lotes de monedas diferentes (para una misma rareza, se entiende). Por ejemplo, si compro un lote de 10 reales de a 8 de Potosí, pagaré menos si todas las piezas son del año 1815 a si son de 1813, 1814… hasta 1822 (más o menos son todas igual de raras). La razón es bastante evidente: comprar una colección con diferentes fechas me permite venderlas o cambiarlas todas a un coleccionista, o quedármelas yo como coleccionista que soy. Pero si son todas de la misma fecha tendré que hacer un mayor número de ventas o cambios, y yo solo me podré quedar con una. Además, si algún colega ya tiene el duro de 1815 de Potosí no podré cambiarle o venderle nada en un caso, mientras que en el otro sí. Por este mismo motivo, si tengo 10 duros de Potosí de 1815 seré susceptible de venderlos más baratos que si solo tuviese uno, al fin y al cabo me han salido más baratos y todavía me quedarán existencias.

Pero cuando digo «más barato» me refiero a «razonablemente más barato». Volviendo a los paquillos de palo curvo, siendo una moneda tan falsificada el hecho de que un comerciante tenga 20 expuestas ya de por sí chirría. ¿No será que las está «fabricando» el mismo o algún amigo suyo? En cualquier caso, y dando por supuesto que las piezas fueran auténticas, sería razonable que dijese: «mira, normalmente estas monedas se venden a 120-150 euros, como tengo muchas te las dejo en 110 cada una». Eso puede ser creíble, pero no que me deje a 30 euros.

La razón de fondo es que cualquier comerciante estaría encantado de comprar paquillos de palo curvo a 30 euros. Y a 60 euros. Yo me veo perfectamente capaz de vender 500 palos curvos a 60 euros el ejemplar en una mañana. Y es más, lo haría sin levantarme de la silla: basta con llamar a algunos comerciantes con quienes tengo confianza y las monedas están vendidas hoy mismo. Si esto lo puedo hacer yo, ¿qué no haría un profesional? ¿para qué iba a estar pasando frío un domingo por la mañana en la Plaza Mayor de Madrid si se hubiera podido quedar en su casa tumbado y ganar más dinero?

Pero además, si en un ataque de locura llega ese vendedor a la plaza con los paquillos auténticos y vendiéndolos a 30 euros, esas piezas le duran en la mano lo que una piruleta en la puerta de un colegio. El primer colega que le vea las monedas y vea que tiene unos palos curvos a 30 euros cada uno le compra todos los que tenga. Cuando digo todos es que si tiene 100 en el expositor, se lleva los 100 y suelta 3000 euros sin dudarlo.

Aprovecho que hablamos de las 100 pesetas de Franco para mostraros una pseudo-cartera de las mismas. Esas «cosas», como la de la imagen, salieron en los años 70 fruto de alguien con un sentido de la estética un tanto desviado. NO son carteras oficiales, por lo tanto no tienen interés para el coleccionista. Además, yo solo he visto dos de esas en mi mano y ambas tenían un 1966 (19-69) que imitaba el palo recto pero que era falso. Eso sí, muy bien falsificado: un profesional con mucho prestigio me tuvo que decir en qué fijarme para poderlas reconocer bien porque de primeras me la hubieran colado. Con esto no digo que todas las «cosas esas» tengan el palo recto troquelado, pero en mi pequeña experiencia es lo que me he encontrado.

19 comentarios en “Muy baratas porque tengo muchas”

  1. Ese vendedor es un golfo, a mi me las vendieron pero me comento el vendedor que esas monedas eran troqueladas para tapar huecos del album,y me costaron 9 euros cada una.

  2. Como la vida misma.
    Muy buenas foreros, un saludo para todos y felicitaciones una vez mas a nuestro moderador, Adolfo, por esta magnífica entrada.
    Estoy totalmente de acuerdo con lo expresado en este post, nadie da duros a cuatro pesetas, menos aún en mercadillos (por extensión también Ebay, Convenciones, numismáticas, etc), donde la totalidad de todos los comerciantes saben de lo que va el tema…, bueno, salvo excepciones, que seguramente tendrán una explicación, digamos…»psico-esotérica».
    Una vez mas, creo que debe prevalecer ante todo el SENTIDO COMÚN, del cual ya hemos repetido hasta la saciedad que suele ser el menos común de los sentidos.
    No nos engañemos, yo el primero, sobre todo en nuestras primeras experiencias como compradores, con nuestra oportuna dosis de arrogancia, hemos buscado la oportunidad, el chollo, la gran ocasión, y el también oportuno vendedor, conocedor a Kilómetros de este tipo de novicios compradores, con poco que su honradez flaquee lo más minimo (entendiendo que son los menos), va a intentar «darle lo que busca» al pardillo de turno. Lo dicho, no nos engañemos, todos, yo el primero, tuvimos algún que otro devaneo al estilo de lo dicho, sobre todo en nuestros «amaneceres» como coleccionistas. Por otro lado, es totalmente legítimo buscar y rebuscar la mejor de las ocasiones y si se encuentra, mejor que mejor, lo que no debemos es caer en inocentadas como la comentada por Adolfo en el presente post.
    Personalmente creo que, si no se es demasiado exigente ni exclusivo a la hora de adquirir piezas, cosa que debería ser la tónica de todo coleccionista humilde o bisoño,el riesgo de caer en trampas o estafas como la comentada por Adolfo en el presente post, puede ser mínimo. Salvo mejor criterio. Equus.

  3. Muy buenas Equus, espero que te hayan ido bien las vacaciones!!

    He actualizado la entrada para incluir otra variante de este mismo timo, la de «te las dejo muy baratas porque me hace falta dinero». Viene a ser más o menos lo mismo.

    @Joaquin, está claro que el vendedor ese es un timador. Una cosa es vender las piezas como troqueladas para «rellenar el hueco» (vendiéndolas razonablemente a un precio un poquillo por encima de su peso en plata), y otra es vender esas mismas monedas troqueladas como auténticas.

    saludos,
    Adolfo

  4. Has mostrado un ejemplo de la vida misma para ratificar uno de los principios básicos en la compra de monedas: los chollos no existen, las estafas sí. Por otro lado, creo que no hay que obsesionarse mucho en «rellenar hueco» como sucede en las colecciones de monedas posteriores a 1870. Para un principiante con tener en su colección cada tipo de la moneda correspondiente, creo que es más que suficiente, y no perder la cabeza con tal año o estrella que «quiero conseguir como sea».

    1. Concuerdo. Me parece más interesante y más bonito tener variedad de bustos y leyendas, que tener un porrón de monedas clavadas pero con el numerito diferente. Ya si nos metemos en la importancia histórica o por preferencia personal de un año u otro, la cosa cambia. O que topes con una moneda en una calidad superior y te llame la atención, aunque ya tengas otra igual, pero de otro año.

      1. Este tipo de cosas es cuestión de cada coleccionista. Hay quienes prefieren centrarse en periodos más pequeños y tener muchas monedas muy parecidas (que se diferencian en años), otros que prefieren tener monedas representativas de periodos muy amplios y cualquier intermedio es posible.

        En EEUU hay muchos coleccionistas que se dedican a coleccionar monedas por cuños. Es decir, se centran en periodos muy pequeños, como pueden ser los «large cents» (céntimos emitidos entre 1793 y 1857) y quieren tener todas las variantes de cuños de esas monedas. Bueno, en el caso de los large cents no creo que nadie lo haya conseguido porque hay cientos de variantes de cuños y una colección así no creo que se pudiera realizar a lo largo de una vida (hablamos de millones de euros y de muchas variantes rarísimas).
        Así que ya veis hasta dónde llegan algunos, que se pasan toda una vida coleccionando variantes casi inapreciables de una misma moneda.

        saludos,
        Adolfo

  5. Entiendo que esto es un blog y no un foro, por lo que a lo mejor lo que voy a comentar no ha lugar. Como soy nuevo y puedo escudarme en que no se cómo funcionáis los habituales, me voy a arriesgar.

    ¿Cómo de popular es la numismática vaticana? ¿Hay mercado?, ¿hay afición? Como ya decía en mi presentación, lo que me ha traído a este mundo de las monedas es la Historia, y los Estados Pontificios son un imán para mí. He «googleado» un poco y se ven piezas bonitas, pero tampoco he profundizado mucho.

    Un saludo.

    1. Hombre, lo suyo es debatir sobre la entrada… pero tampoco pasa nada por sacar otros temas numismáticos.

      No sé a qué te refieres por «numismática vaticana», pero supongo que sean monedas emitidas por el Estado Vaticano a lo largo de su historia. Si te refieres a monedas de euros, hay mucha afición y hay mucho mercado en toda Europa. También es fácil encontrarse con liras del siglo XX, y esas mucho más baratas.
      Y si te refieres a monedas de los Estados Papales, son monedas muy muy comerciales en el mercado internacional, sobre todo las de oro. Además, no son muy caras en comparación con otras monedas de plata y oro europeas. Concretamente, las piezas de oro renacentistas a mí me parecen verdaderas obras de arte y son relativamente asequibles.

      Ahora bien, cuando digo que son queridas en el mercado internacional me refiero a que es fácil comprarlas y venderlas en subastas o convenciones internacionales. En España hay muy pocos aficionados si los comparas con la cantidad de coleccionistas de moneda española que hay.

      Saludos,
      Adolfo

  6. Gracias por tu respuesta, Adolfo.

    Me daba cosa cambiar totalmente de tercio en medio de una entrada que no tuviera nada que ver, pero es que no veía la forma de preguntarte si no.

    Me refería a las monedas acuñadas antes de la Unificación Italiana, y la verdad es que tu respuesta me pone una sonrisa en la cara: fácil de encontrar y relativamente asequibles. Eso me anima a profundizar en el tema.

    Una vez más, gracias por responder.

  7. OLA ADOLFO, RECIBISTE MI VOTO PARA TU TESIS? MUY INTERESANTE EL ARTICULO, POR CIERTO NO RECOMENDARIA A LOS NOVATOS COMPRAR UN PAQUILLO DEL *69, A NO SER Q LO HICIERAN EN UNA NUMISMATICA O EN UNA SUBASTA.

    1. Bueno, en este caso el que se lo vendía era un profesional, o eso creo. Yo recomendaría a los novicios que si se meten en los de *69 intenten que el profesional que se lo venda les firme un certificado de autenticidad. Quizá tengan que pagar 20 euros más, pero dormirán más tranquilos.

      Por lo de la tesis me imagino que te refieras al voto del concurso (no era la tesis, sino que mandé una aplicación que monté en la tesis a un concurso). Vuestro voto era para el premio del público y no sé por qué quitaron mi propuesta de ahí. En cualquier caso, al parecer estoy seleccionado como finalista y el fin de semana que viene me voy a Suiza para exponer mi trabajo. De paso estaré unos días en Ginebra en un congreso que tiene muy buena pinta.

      Saludos,
      Adolfo

  8. Hola buenas noches, soy lector asiduo pero es la primera vez que posteo, alguna vez tenía que ser.
    Quisiera preguntarte si puedes exponer cuáles son las pautas que en su momento te enseňaron, de las monedas del 69 para poder identificar las buenas de las troqueladas.
    Enhorabuena por tu blog, nos enseňa a mucha gente.

    1. Hola.

      Me alegro de que te animes a postear si llevas tiempo leyéndonos.

      Por aquí tienes algunas ideas que vi publicadas hace tiempo sobre la estrella 69: https://blognumismatico.com/2010/03/17/diferentes-estrellas-en-las-100-pesetas-de-franco/
      Lo que hay que fijarse es que la forma del 1 y del 9 se corresponda a como debería ser, así como que la estrella no haya sido rebajada (limada para quitar el dígito que había + vuelta a regrabar). Sé un par de cuestiones más, pero el numismático que me las dijo me pidió que no las difundiera. Tampoco las he visto publicadas en ningún foro ni ninguna otra publicación. Así pues, hasta aquí puedo contar.

      Saludos,
      Adolfo

      1. Jean lou/ Juan lucas

        Hola a todos y especialmente al autor de este blog.
        Llevo algún tiempo leyendo entrada por entrada y cada una de ellas me han aportado en mayor o menor medida un mayor conocimiento de la historia o de las relaciones sociológicas y por supuesto de Numismática.
        Hecho de menos un índice cronológico a través de los distintos temas, ya que a pesar de ser temas distintos, el tiempo hace madurar y seguir las historias a través de esta cronología desvelará el porque de opiniónes.
        Más quisiera yo poder expresarme y comunicarme con tanto acierto y sobre todo con un razonamiento impecable.
        Pensaba escribir algún día cuando tuviese tiempo de madurarlo, pero una pregunta me ha asaltado durante la lectura de esta respuesta.
        Entiendo que todo no se puede decir, pero si hay más pistas para detectar un 69 troquelado, porque no dinfundirlo?
        Callarse no nos hace «complice» de la estafa?
        Y no me digas que es pata evitar que el sinvergüenza modifique sus falsificaciones; aunque si es para cumplir con su palabra, todo lo demás sobra.

        Con tantas falsificaciones y a pesar de todas las pistas para detectarlas, personalmente compraría uno sólo a uno de confianza o casa de subasta.
        En la última subasta de Cayon se adjudicaron por 145 y 350 euros (curvo y recto) en calidad SC.
        Saludos y gracias por tanta información.
        Sigo por aquí leyendo lo que pueda.

        1. Me alegro mucho de que te guste el blog y me apunto la idea de dar cierta coherencia histórica al blog. Es cierto que mis comentarios han evolucionado mucho en los 4 años y medio que llevo escribiendo (claro síntoma de que he ido aprendiendo), pero ese desorden es intrínseco a la escritura en blogs.

          Por lo que comentas de la estrella, simplemente me indicó cómo ver estrellas rebajadas. Fíjate: https://blognumismatico.com/2014/02/17/estrellas-rebajadas/

          Un saludo,
          Adolfo

  9. pues iba a decir que el sentido común te libra de muchas meteduras de pata, aunque no de todas.

    en cualquier caso me quedo con la reacción de Adolfo, que lejos de querer agrandar su ego abriéndole los ojos al pobre anciano, pensó que era mejor no fastidiarle los últimos años de su vida pensando que lo habían timado, no había necesidad, no iba a caer más en otra trampa, y mejor morir feliz que disgustado.

    y desde luego su nieto, si lo hubiera visto triste por este motivo, seguro que hubiera gastado más de lo que vale un palo curvo auténtico simplemente por ver feliz a su abuelo en sus últimos días.

    a mí me gusta la verdad aunque me duela, pero reconozco que a veces es mejor no saber, sobre todo si ya poco te puede enseñar esa experiencia.

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