Limpieza de monedas

El pasado 7 de agosto se publicó en un discreto blog una noticia en la que se documentaba un destrozo del patrimonio de un pueblo de Zaragoza llamado Borja. Quince días más tarde alguien lo puso en un agregador de noticias y esto hizo que saliese a la luz en los principales periódicos nacionales y de ahí dio la vuelta al mundo. Es un buen ejemplo de cómo actúan últimamente las editoriales, en las que tienen a becarios doscientoseuristas con la tarea de encontrar por la Web alguna noticia curiosa/interesante y decir lo mismo con otras palabras o simplemente traducirlo del inglés (algo que también hace alguna publicación numismática, no nos vayamos a creer). Después, como vieron que tuvo tirón mandaron a Borja algunos periodistas y el Ministerio de Cultura puso todos los medios necesarios para volver a restaurar la pintura. No me cabe la menor duda de que si no fuese por aquel bloguero todo se hubiese resuelto tirando el cuadro a la basura.

En resumidas cuentas, la noticia viene a decir lo siguiente: una imagen de un Cristo del siglo XIX, cuyo autor es Elías García Martínez, estaba en la iglesia de Borja y muy deteriorado. Así que una buena señora llamada Cecilia, cogió la imagen, una caja de témperas y ella misma restauró la imagen con toda su buena voluntad. La imagen de abajo muestra el antes y el después.

Me imagino que todos nos llevemos las manos a la cabeza: ¿en qué cabeza cabe ponerse a restaurar un cuadro sin tener ni el más mínimo conocimiento de arte? ¿qué gusto tendría la señora para creerse que la imagen estaba mejor después de su «restauración» que antes?

Pues resulta que en la numismática actos como éste son el pan nuestro de cada día, a pesar de que no salgamos en los periódicos: no hay novicio que empiece con la numismática que no le dé por sacar brillo a sus monedas. No hay foro que se precie que no tenga una sección dedicada a la limpieza de monedas, donde el personal discute sobre la mejor manera de sacar cada tipo de suciedad u óxido.

Ahora bien, la pregunta que hay que hacerse antes de limpiar una moneda es si sabemos limpiarla. Yo no sé, nunca he limpiado ninguna, y me da la sensación de que la inmensa mayoría de quienes se ponen a limpiarlas tampoco tienen ni la más remota idea. Mi experiencia me dice que el 90% de las veces la moneda está peor después de limpiada que antes; el otro 10% suele ser trabajo hecho por profesionales. De hecho, en Estados Unidos hay empresas especializadas en la restauración de monedas, como por ejemplo CRS, que no son precisamente baratas. Hay servicios por los que cobran decenas de miles de dólares, no creo que sea nada que pueda hacer el primero que venga con un bastoncillo y un bote de amoniaco.

La regla es que nunca se deben limpiar las monedas si no se sabe muy bien lo que se está haciendo. Una mala limpieza, o cualquier manipulación que implique el contacto con productos químicos, reducirá el valor de la pieza tanto como si se hubiese taladrado. Ya digo que actos como el del cuadro de arriba ocurren a menudo en la numismática.

18 comentarios en “Limpieza de monedas”

  1. Comparto la idea de que ante la inconsciencia mejor la paciencia, yo por suerte cuando empecé, mi mayor desliz con las limpiezas que practiqué, fue sacar una moneda de 2000 pesetas de su plástico original, y pasados unos meses al ver que se ponía oscura darle una mano de algodón mágico… «nunca mais»
    A partir de entonces únicamente me he dejado liar haciendo electrólisis a cobres que, debido a la suciedad y oxidación acumulada, era imposible identificar siquiera. Aunque tengo que decir también que en el estado de antes y después siguen sin poder considerarse como remotamente bien conservados o por lo menos «limpios» y sigan sin tener valor, pero me lleve algunas sorpresas con las monedas que aparecieron de esos discos verdes. Lo cual me animó a seguir haciendo pruebas.

    Mi consejo es JAMÁS limpiar una moneda que pienses que tenga el más remoto valor en el estado en que se encuentra.
    Pero eso no quita para experimentar con monedas de lotes, mundial muy destrozada, o incluso con moneda circulante. Aprenderás algo de química, un poco de física y pasarás tardes muy entretenidas. Además quizás llegado el momento toda la experiencia que hayas ido cogiendo con monedas sin valor, te haga animarte con alguna que tenga algo de valor con el fin de mejorarla, pero no te engañes si llega ese momento, tardará!.

    PD: nótese que cuando hablo de valor me refiero a un posible valor de mercado, el valor de una moneda es el que te sugiera, yo aprecio muchas monedas que he limpiado o no, aunque solo sea por la intrahistoria que sé que tienen y posiblemente nadie valorará.

  2. La señora esta ya había «restaurado» el fresco otras veces… Pero nunca se atrevió a tocarle la cara…

    Según cuenta ella la «restauración» no esta terminada… Ya que tuvo que salir de viaje y lo dejo a medias.

    Yo no dudo en ningún momento de la buena fe de la señora, y suficiente tiene con la que le esta cayendo … Pero manda huevos lo que le ha hecho a la cara del Cristo!! El parecido con paquirrin es impresionante.

    Como curiosidad diré que unos inversores de arte de Inglaterra quieren comprar el fresco por 2 millones de €.

    También hay que destacar lo bien que le viene al pueblo de Borja la magnitud del caso.

    Saludos ;)

  3. Los consejos de Salva son muy razonables: no tocar nunca una moneda que tenga un mínimo de valor numismático si no se sabe muy bien lo que se está haciendo. Y antes de creerse un experto restaurador, lo mejor es hacer pruebas con cobres asquerosos o con monedas de plata al peso (100 pesetas de Franco, duros de plata malos…).

    El de la limpieza es uno de los palos numismáticos con los que nunca me he metido, pero la verdad es que tampoco me llama para nada. Quizá algún día, aunque con lo manazas que soy…

    saludos,
    Adolfo

  4. Adolfo y Salva, tenéis toda la razón. Sin embargo, ¿qué opináis de las monedas que vienen de 1976 para delante, incluyendo euros y que se encuentran enmohecidas por haberlas tenido en tiras de plástico no apropiado durante años? El moho, que es la antesala de la oxidación verdosa propia de los cobres, puede quitarse lavando la moneda con agua y jabón y pasando con cuidado un trapo después sobre la moneda. Sin embargo, esto sólo lo he probado con piezas de valor ínfimo y tengo serias dudas de que no dañe la pátina. ¿Qué hacemos con esas monedas? Puede que nos parezcan piezas triviales y tan baratas que se nos descuide que muchas veces los numismáticos las conservan mal ¿Pero qué pasa cuando ves en una tienda una tira de Mónaco 2001 desgraciada por llevar diez años metida en una tira de plástico? Un saludo

  5. jajaja, muy bueno el dos euros!!! :D

    De acuerdo con Salva y con Adolfo. Creo que en otro post ya comenté el caso de un «comerciante casual» que conocí que limpieba monedas mbc de brasil con salfumán y amoníaco (por favor, cuidaos del salfumán, que también come la plata) y luego las vendía diciendo que estaban «flor de cuño»… y se hinchaba a vender!! Reconozco que caí infinidad de veces en la tentación en mis comienzos, y sí, es cierto que se aprende mucho: química, física, alquimia, vudú, teología… Ahora bien: cuando se saben hacer las cosas, el lote gana y mucho: a menudo manchas de barniz o pintura, o las famosas «lechugas» de los cobres pueden representar una diferencia de valor considerable que se puede conjurar con una manipilación paciente y experta. Saludos

  6. Buenas Miguel, yo también tuve ese dilema, y he tenido 2 casos:
    – con una tira (bastante común) de moneda española del mundial del 82.
    – con monedas circulantes de euro que guardé en camisas sin cartón estando la moneda en contacto directo con el PVC.

    La conservación de monedas dentro de fundas de PVC en mi opinión no es nunca aconsejable, no es un plástico inerte por lo que es cuestión de tiempo que las monedas o bien cojan una capa de viscosidad verdosa, o bien se marquen u oxiden de forma extraña y finalmente se echen a perder. En mi caso las del mundial las «tiré», estaban muy muy mal (el lugar donde las guardé contribuyó notablemente..). Y las de euro las limpié con un trapo de tela, unas en seco y otras tras mojarlas con agua y jabón. En ningún caso conseguí restaurarles el brillo original, y dudo que se pueda conseguir una pátina similar a la que tendrían de no haber sido guardadas en estas fundas.

    A tu pregunta diré que hay gente con la visión romántica de que los coleccionistas de monedas tenemos la responsabilidad de conservar la moneda para las generaciones venideras, y en mi opinión conservar una moneda del siglo XX conlleva los mismos o incluso más cuidados que monedas muchísimo más antiguas (entiéndase por el estado de calidad proof o sin circular donde los daños se ocasionan al mínimo descuido).

    Os dejo una pregunta. Si tan demostrado está que ciertos modos de almacenamiento de monedas resultan perjudiciales con el tiempo, ¿porque no se retiran del mercado? o mejor dicho, ¿porque la gente las sigue comprando?

  7. Muchas gracias Salva. La cuestión más bien es ¿por qué los numismáticos son tan poco cuidadosos con esas monedas? Suelo comprar en tres numismáticas de tres comunidades diferentes de España y en todas me he encontrado lo mismo. Tiras de PVC con monedas estropeadas. Cuando pregunté a uno de ellos el por qué de esta costumbre tan perjudicial me respondió que porque las tiras de euros eran más vistosas en esa presentación. Sin embargo, poco después empecé a ver cómo organizaba las tiradas en bolsitas de plástico menos dañino. Supongo que valoran poco estas piezas porque su precio es bajo (a pesar de que puedan triplicar su valor nominal)

    ¿Por qué la gente las compra? La verdad es que a mi me ha resultado muy complicado encontrar buenos ejemplares SC de estas épocas que no sean de una cartera. Con gran acierto, el Catálogo de Luz de Faro de los euros clasifica la sección SC en dos partes: EBC (si aún estando sin circular tienen defectos por los golpes recibidos en su fabricación y transporte) y FDC (si no tienen desperfectos). Si se está haciendo una buena colección selectiva creo que merece la pena comprar una cartera y romperla. A algunos les parecerá un sacrilegio, y lo entiendo.

    Personalmente opino que todos los plásticos, exceptuando el de los euroset actuales y el de las cápsulas, son perjudiciales para la conservación de las monedas. Incluyo en estos el de las monedas de 2000 pesetas y 12 euros. En varios ejemplares que tengo he observado como se formaba esa película de la que habla Salva (12 euros 2002 por ejemplo). En cambio, el Proof de esos 12 euros del 2002 está encapsulado y como nuevo.

    Comparto la visión romántica de la que hablas Salva, y trato de preservar las monedas que me llegan del mejor modo posible. Pienso que el descuido que se está teniendo con los euros en SC y su forma de venta va a hacer que dentro de unas cuantas décadas un buen SC va a ser más raro de lo que pensamos ahora.

    ¿No creéis que habría que reclamar a los numismáticos mayor esmero en la conservación de estas piezas?

  8. Totalmente de acuerdo Miguel, supongo que con el tiempo más de uno se arrepentirá de no haber prestado un poco más de interés por como tiene las series almacenadas.
    Los comerciales numismáticos no siempre comparten el interés por la profesión, y soy de los que piensan que abunda cada vez más, los más comerciantes que numismáticos. Es una pena, aunque creo que en nuestra exigencia a la hora de abordar nuestras colecciones está la clave.

  9. Tal vez el afán por la limpieza de monedas aparece más en las monedas modernas; es lógico, pues se sufre lo suyo cuando, por ejemplo, una moneda de plata de acuñación reciente desmejora su inicial aspecto incólume con el paso de los años. Es preferible no tocar la moneda, pues no se puede pretender que una moneda de plata tenga el mismo aspecto hoy que dentro de cuarenta años, aunque no haya circulado. Eso no deja de ser, al fín y al cabo, la pátina que va adquiriendo la moneda con el transcurso del tiempo. Otra cosa serán los procesos (¿químicos?) a los que someten las acumulaciones de monedas antiguas pegadas halladas bajo el mar o bajo la tierra, procesos que desconozco pero que me figuro sean necesarios.

  10. Buen debate!!

    En mi opinión la limpieza de las monedas modernas no debería ser un problema: con no comprar aquéllas que no han sido bien guardadas va que chuta. Si resulta que nos presentan unos euros que están todo roñosos o unas piezas del rey a las que les ha salido una pátina verdosa… pues fuera: hay comerciantes más que de sobra para no tener que incorporar a nuestra colección monedas que no nos satisfagan. Si nos volviésemos más exigentes los comerciantes cuidarían más este tipo de cosas, pero claro, para ser exigentes hay que estar informados…
    Personalmente, dudo bastante que a largo plazo vaya a poder haber una carencia importante de monedas de la segunda mitad del siglo XX o de principios del XXI en grandes calidades ya que todavía quedan muchísimas bolsas y cartuchos guardados de casi todos los tipos.

    Claro está que hay casos flagrantes, que se deben exclusivamente a la ignorancia de la gente. Yo he visto a una persona que heredó tres tiras *69 y otras tres tiras *68 que se habían pasado 40 años en la funda de PVC original metidas detrás de un falso azulejo de una cocina. Imaginad cómo estaban las pobres!! No había nada que hacer.

    Y la razón de que se sigan usando contenedores no aptos vuelvo a achacarla a la ignorancia: una persona que sepa lo que hace comprará envoltorios de mylar o de otro plástico neutro. Pero una persona que no sea consciente no entenderá la diferencia y se comprará unos de PVC porque son un poco más baratos. Así que por ahorrarse 0,5 céntimos en cada contenedor (no más) corre un enorme riesgo de echar a perder su colección. Evidentemente nadie que esté mínimamente informado haría algo así.

    saludos,
    Adolfo

  11. hola amigos soy de Chile y llevo años coleccionando monedas, al comienzo cometí muchos errores con algunas tratando de limpiarlas, luego entendí que lo mejor es dejarlas tal como están, mis monedas las guardo en álbumes de esos que tienen los compartimentos de plastico (puede ser algun polimero o derivado del polietileno o pvc), la verdad es que pensaba que era el mejor metodo para conservarlas, por lo que he podido leer de ustedes, parece que no es asi, no hace mucho me consegui la serie completa de la cruz gamada nazi y las puse en este album, puede sufrir algun daño en este tipoi de albumes, y si es asi cual es el mejor metodo para guardar las monedas?

  12. Según lo que comentas Adolfo creo que a los numismáticos no les vendría mal saber un poco de química sobre metales. Tampoco son tantos los que se emplean en monedas. Unos cuantos coleccionistas, entre los que me incluyo, estaríamos dispuestos a pagar ese sobreprecio de nada.

    Es cierto que aún quedan muchos cartuchos de moneda moderna. Sin embargo, viendo las cosas a largo plazo (fijándonos por ejemplo en las monedas del centenario) las piezas abundan en conservaciones bajas pero escasean en altas, precisamente porque los años en que se acuñaron mucho era para sacarlas a circulación porque existía demanda. El Banco de España está actualmente sacando a circulación bolsas de los años anteriores, a veces de más de un lustro atrás, como las del 2004 que vi hace poco. Y si bien es cierto que actualmente se acuñan muchas más monedas que hace 100 años, también es cierto que se destruyen y pierden más. Si las reservas de la FNMT se consumen a lo largo del tiempo (para reducir la acuñación de nueva moneda) y los numismáticos, o una parte de ellos, conservan mal sus reservas, es posible que (dentro de más de 100 años) se revaloricen. Usamos un sistema monetario que tiene posibilidades de durar mucho tiempo sin alteraciones de forma (véase el mítico centavo de dólar o los francos suizos)

    No obstante, como decías, muchas piezas serán baratas. No hay más que fijarse en los céntimos de 1870 y algunos de Alfonso XIII, que aún se pueden conseguir en SC por bajo precio.

    Me siguen preocupando casos como la tira de Mónaco 2001. Siendo como es un producto de demanda internacional y de tan escasos ejemplares.

    1. Ciertos ejemplares creo que sí que pueden tener demanda, como algunas carteras de Mónaco o del Vaticano. No obstante, hay muchísimos coleccionistas de euros (al contrario de lo que pasaba con las pesetas de El Centenario en el siglo XIX) y cada coleccionista guarda centenares de monedas. Además de que hay muchos (comerciantes y particulares) que guardan literalmente cientos de miles de monedas en bolsas que compraron a valor facial.
      No creo yo que vaya a ser fácil que haya tanta demanda como para una subida importante de precios, aunque estoy de acuerdo contigo en que lo normal es que el euro aguante muchos años y sea coleccionado por mucha gente durante bastantes décadas.

      saludos,
      Adolfo

  13. Jose Hernandez Dominguez

    Buenos dias.Quisiera saber vuestra opinion,sobre unas monedas que limpie con una goma de nata blanda.Tenian una patina horrorosa,fea con ganas,al limpiarlas perdieron valor numismatico,mucho,poco o ninguno.Gracias anticipadas por vuestra ayuda

    1. Eso no es un problema: se trata de una manipulación física y no química, con lo que el único efecto secundario es que puedes haber aumentado el nivel de desgaste de la pieza.

      Hay otros que frotan la moneda con el pulgar, es lo mismo.

      saludos,
      Adolfo

  14. Al igual que el anterior forero, solo utilizo goma de nata para limpiar algunas monedas (solo aquellas bastante sucias o con patina fea). Con casi todas, antes de pasarlas a capsula o cartoncillo lo unico que hago es darles con algodon impregnado en alcohol sanitario sin frotar en exceso para crear una asepsia temporal antes de encartonarlas o encapsularlas. De este modo, entiendo que apenas sufren desgaste, en cambio neutralizo en cierta medida numerosos agentes agresivos. En cuanto al posible desgaste producido por la goma de nata, es insignificante, muchisimo menor que la simple manipulacion o roce con nuestras manos, pues nuestras manos contienen restos de grasa, polvo, plasticos, incluso metálicos, y son esta conjugacion la que ciertamente desgasta las monedas (siempre minimo). Jamás se me ocurriria limpiar en serio moneda alguna, salvo que tal limpieza compense. Es mi opinion y experiecia propia. Por otro lado, las monedas de plata que contengan grasa y suciedad por la circulacion, quedan infinitamente mas bonitas y mejor dispuestas para su posterior encapsulado. Otra cosa bien distinta es pretender sacar brillo SC sobre una preciosa patina, lo cual es un crimen. Salvo mejor criterio. Enrique.

  15. Hola,

    Pocos hemos sido los que hemos tenido un maestro para que nos aconsejase en el tema.

    Pondre mi caso que ya comente en una entrada o post anterior;
    En mi pueblo nadie sabia de monedas, solamente de limpiar algún metal y cuando preguntabas pues te decían “ limpialas con vinagre en un vaso y hechas bicarbonato, y a si he limpiado yo hace unos 25 años monedas de maravedís de Felipe II, y con un estropajo verde de fregar las frotaba pero bien, jajja, bueno pero ya cogieron patina, jaja.

    Hablo de cuando tenia 14, 15, 16 años. Quien tenia en aquella época libros de numismática, ¿ Que era eso? , ¿ Internet? ¿ Que es eso?, y si no vivías cerca de la capital en los pueblos pocas tiendas numismáticas y puestos habia para poder aprender de los consejos de los que algo sabían del tema.

    Ahora limpiar una moneda lo veo como colgar un cuadro del siglo XVIII con un clavo y clavándolo por la tela del cuadro en vez de por el marco.

    Creo que hemos sido muchos a los que el plastico nos a pasado factura, yo no creo que compre mas una hoja de esas con circulitos para meter las monedas por medidas, totalmente prohibido, no quiero mas verde en las monedas.

    Las extranjeras con poco valor numismático en cartoncillo y las españolas en capsulas.

    Saludos.

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