La subasta de Cayón de enero de 2011

A mi casa me llegan cada poco tiempo catálogos de subastas numismáticas. Tanto es así que uno ya se acostumbra a recibir gratuitamente libros de monedas a todo color de forma totalmente gratuita; parece como si ya no tuviesen valor alguno. No obstante, no es tan común recibir catálogos que cuando los lees, independientemente de si se puja por algo o no, se aprende de ellos. Tal es el caso del catálogo de la próxima subasta de Cayón, del que se pueden extraer un montón de cosas. En esta entrada voy a dejar un pequeño repaso del conocimiento adquirido, fijándome en algunas piezas concretas (que no tienen por qué ser las más caras o espectaculares) y no en la subasta en su global.

La primera pieza en la que hay que fijarse es en la preciosa dobla de la banda de Juan II con ceca de Ávila que se muestra arriba. La moneda es inédita y era desconocida hasta la fecha; probablemente sea una pieza única. De ella hacen una muy buena descripción, indicando que la fecha más probable de acuñación sea verano de 1420, cuando Juan II pasó una temporada en Ávila en la que aprovechó para casarse. También hacen alguna reflexión artística bastante interesante sobre la pieza, destacando dos detalles.

El primero de ellos es que la banda del escudo va de derecha a izquierda, algo muy raro que sólo se da en otro modelo acuñado en Sevilla (tipo 16.10 en el libro de Mozo y Retuerce, quien por cierto Cayón ni siquiera cita). El segundo detalle que indican es que si nos fijamos en los castillos del escudo se asemejan a una catedral gótica, mostrando los contrafuertes, exactamente igual que los castillos de las monedas acuñadas en Sevilla. No obstante, en las doblas de la banda acuñadas en Burgos (abajo se muestra una procedente de la subasta Caballero de las Yndias) el castillo recuerda a unas torres románicas. Esto hace pensar que el ensayador sienta más próximo el arte gótico que el románico, o la catedral de Sevilla del románico burgalés, lo que hace creer a Cayón que el ensayador fuese sevillano y no burgalés como podría pensarse en un principio por la proximidad geográfica. Un tercer detalle se le escapa a Cayón y es que la marca de ceca se encuentra sobre el escudo, lo cual sólo se da en las cecas de Burgos y Coruña, y no en Toledo o Sevilla, donde se muestra la marca de ceca en el reverso.

Otra moneda muy curiosa son los ocho reales que se muestran abajo. En ellos se observa un exceso de metal sobre el número 8. Según Cayón, esta marca se debe a que al labrar el punzón en un primer lugar se procedía a marcar las zonas donde se grabarían los diferentes elementos y luego se procedía a la grabación en sí. Por el motivo que sea, después de grabar el 8 no se pulió correctamente el cuño y ahí quedo ese exceso de metal para que los futuros coleccionistas se hiciesen una idea de cómo trabajaban los ensayadores mejicanos.

No obstante, en la subasta hay una pieza que llama la atención y que hace pegar un bote en el asiento a cualquier aficionado a la numismática del Centenario de la Peseta. Se trata del duro 1871 (18-72) que se muestra abajo.

Al verlo un amigo me escribió y me preguntó que si conocía la existencia de este duro. Yo le dije que no y lo comentamos en el foro de Imperio Numismático, donde el resto de aficionados tampoco habían oído hablar nunca de él.  De hecho, en la revista Numisma se publicó en su número 12 un artículo de Rafael Sabau titulado «Las acuñaciones de duros en el sistema monetario de 1868», donde se concluye como altamente improbable que exista el duro de 1871 (18-72). En dicho artículo se dice que por la Real orden de 5 de marzo de 1871 se aprueba la acuñación de duros con fecha 1871 (18-71), (18-72), (18-73), (18-74) y (18-75), siendo el año 1872 en el que más duros se acuñaron, pero siendo todos ellos con estrellas (18-71). Indica también que Antonio Bernabé Sánchez indica en el Boletín Ibero Americano de Numismática (diciembre de 1952) la existencia del duro de 1871 (18-72) pero sin proporcionar ninguna prueba argumental ni ningún ejemplar conocido. Así pues, concluye Sabau, si después de que tanta gente haya coleccionado duros del Centenario parece poco probable que de existir ese duro no haya aparecido, lo que hace pensar que de hecho, no existe.

Pues bien, aquí parece haber uno, y lo ponen sin dar ningún tipo de explicación de dónde lo han sacado o qué les hace pensar que es un duro auténtico y no está troquelado. Es, simplemente, una pieza más a subastar. Así pues, llamé por teléfono a Cayón y le expliqué mis argumentos diciéndole que tenía serias dudas sobre la autenticidad del duro, aunque no dudaba en ningún momento en su palabra. Me dijo que inspeccionó la pieza y que en su opinión es buena y no está troquelada; que hay veces que aparecen monedas inéditas y que aunque en El Centenario es difícil que pase, puede ocurrir. También me dijo que él garantizaba la pieza de manera vitalicia, de forma que si algún día se le demuestra que es falsa o troquelada, él devolvería el dinero correspondiente y fin del asunto.

Con todo, y por mucho que Cayón sea uno de los numismáticos más prestigiosos de España, sigo teniendo serias dudas de que ese duro tenga estrellas (18-72). En caso de serlo lo normal hubiera sido dedicar un extenso estudio a ese lote, al igual que se hizo con la dobla de la banda que se muestra más arriba. Por otro lado, la repercusión en la comunidad de coleccionistas, de haberlo dado credibilidad, hubiera sido enorme y seguro que el lote se hubiera rematado en bastantes miles de euros. Nada de esto ha ocurrido, por lo que me extraña que realmente el duro 1871 (18-72) exista.

Lo único que no me ha gustado del catálogo es la publicidad que hace, indicando que ellos venden más caro comparando dos piezas de oro rematadas en su sala de subastas y en Cayón en la subasta de Caballero de las Yndias (no lo dicen explícitamente, pero está claro a qué se refieren). Una comparación así de directa es engañosa y muy fea, más que nada porque los precios de las monedas muy raras son muy volátiles y es fácil que de una subasta a otra se rematen por el doble de dinero o más. Seguramente Aureo también podrá encontrar ejemplos de piezas importantes que se han rematado en Aureo a más del doble que en Cayón.

De hecho, una de las piezas que indican es la onza madrileña de 1710 que se muestra arriba. Dicen  con letras grandes que en 2001  se remató en Cayón por 103.674,59 euros, mientras que en 2009 se remató «en otra subasta» por 47.200 euros. También podrían haber dicho que en 1988 se vendió en Stacks por $126.000.

Un último apunte es que esta vez la subasta de Cayón es en enero, apenas quince días después de la 39 Convención Internacional de Numismática de Nueva York. Esto puede hacer que algunos profesionales anden con poco efectivo para esta subasta y que los coleccionistas más modestos nos podamos hacer con algún que otro lote, aunque está claro que las piezas buenas hay que pagarlas.

Antes de despedirme no me puedo resistir a mostrar este precioso octodragma de Arsinoe II en calidad EBC+. ¡Quién lo pillara!

26 comentarios en “La subasta de Cayón de enero de 2011”

  1. Me ha encantado este post. Se nota que sabes un monton.

    Yo me dedico a coleccionar el centenario de la peseta y a mi tambien me llamo la atencion el duro del 72 de Amadeo, tanto su existencia como el precio. Sin embargo no me siento autorizado para dar mi opnion a un numismatico, ni a Cayon ni a ningun otro.

    Espero sinceramente poder adquirir algun lote pero como me adjudique todos a casi todos por los que he pujado me van a hacer un verdadero roto.

    Bueno, recibe mi mas sincera enhorabuena por lo profundo de tus conocimientos y la buena sintesis y seleccion que haces de los temas.

    Un saludo.

  2. Pablo Díaz Cardamas

    Pues estás en lo cierto Adolfo. En España los catálogos de Cayón son los mejores con diferencia, y a distancia de los de Aureo. Incluso con el compendio de Caballero de las Yndias muchos nos hemos llevado un chasco, incluso pagándolo. Son los que más se parecen a otras empresas del sector internacionales, como CNG o NAC cuyos catálogos son fantásticos. Yo sigo sin entender porqué no añaden la procedencia en los catálogos, que sería algo que subiría el precio de adjudicación. Buen post. Sigue así.

  3. Bueno, yo he consultado con algún coleccionista del centenario de los de toda la vida y éste me confirma no solo que efectivamente conocía la existencia de ese duro (tuvo que comprobarlo en sus notas) sino que el la tiene reflejada como una variante de Amadeo. Estoy esperando a ver si me hago esa lista de variantes, la comparo con la tuya y pongo las que no hayas recogido.

  4. Muy buena entrada como siempre. Por cierto si quisiera pujar por alguno de los lotes donde podria hacerlo (via internet) el enlace que pones de «próxima subasta Cayón» redirecciona a un cartel de la publicidad de la subasta pero nada más. Y para poder pujar habría que cumplir algun requisito como estar registrado… Gracias y un saludo.

  5. Fantàstica entrada, yo tambien me fije en la descripcion del ano…pense que era un error tipografico de la casa de subastas al imprimir el catalogo. Felicidades

  6. La verdad es que el duro de Amadeo es sospechoso, sospechoso. Yo no me lo termino de creer.

    Aunque creo que va a alcanzar un precio de adjudicación bastante alto, porque habrá gente que otorgue una fiabilidad total a la palabra del Sr. Cayón, y entonces, estaría pujando por una pieza única.

  7. La verdad es que a mí también me parece, cuando menos, una falta de sensibilidad bastante grande hacer comparaciones entre sus precios de adjudicación y los de otras salas. Si lo que pretenden es animar a futuros vendedores a consignar sus piezas en Cayón, el mensaje subliminal que se desprende es bien distinto: que no merece la pena invertir en numismática, si es así que la misma pieza se vende en 2001 por más de 100.000 euros y ocho años más tarde no alcanza ni la mitad de esa cifra.
    Creo que están tirando piedras contra su propio tejado y, aunque cualquiera un poco enterado es consciente de lo que comentabas acerca de la «volatibilidad»de los precios en las piezas de gran valor, para la gente que se acerque por primera vez a este mundo puede resultar un mensaje bastante contraproducente.

  8. A mi particularmente no me gusta nada la forma de trabajar de los hermanos Cayón. Por un lado, los precios de salida son ridículos, es como si quisiesen devaluar las monedas intencionadamente para poder ellos comprarlas más baratas. Lotes que salen a ¡10 euros! y sabemos que se ban a adjudicar como mínimo x10 ó x20 veces su salida. ¿qué pretenden realmente? ¿Esperáis coger algún lote a precio de chollo?. Ya veréis los precios de adjudicación…¿buscan que al ser tan baratas las salidas sean más los que se animen a pujar?. Estoy casi seguro de que aquí se juega con precios de reserva. Es decir, por menos de un determinado precio no voy a vender el lote, así que no os hagaís muchas ilusiones de cogerlos a precios razonables. Al final, como ellos mismos dicen, son los más caros que venden, o si no, mirad las adjudicaciones de las últimas subastas del hotel Ritz (las buenas no las subastas rápidas donde se venden restos de almacen).
    Por otro lado, si como ellos mismos reconocen, venden más caro que otras subastas, que cojan a otro tonto que yo seguiré comprando en Aureo o donde más barato se consigan.
    Adolfo, enhorabuena por tu página que me encanta y me tiene enganchado.

  9. Están saliendo cuestiones muy interesantes en esta entrada. De hecho, he mandado un mail a Adolfo Cayón por si quiere pasar a leer la entrada (y comentarla).

    Juan Carlos, por lo que dices es que no te gusta el estilo de Cayón. Tu opinión es muy respetable y si ello te hace no pujar en las subastas de Cayón pues estupendo, pero a mí no es un estilo que me disguste.

    Ellos sacan los lotes a un precio ridículo para asegurarse su venta. Un céntimo de 1911 SC (es un ejemplo) se va a rematar entre 100 y 130 euros; da igual que lo saques a 90 euros (como hace Aureo) que lo saques a 10 euros (como hace Cayón), el precio de remate va a oscilar entre esas cifras. De hecho, es una moneda que ya he comprado en tres casas de subastas diferentes y siempre al mismo precio.

    Cayón quiere asegurar la venta de los lotes para así cobrar tanto al vendedor como al comprador. Si pone un lote y lo saca a un precio elevado y no lo vende no cobrará por ello apenas nada. Es su estilo y a mí no me parece mal. De hecho, ya le he comprado varias veces y generalmente el precio de remate me deja cierto margen de beneficio a mí.

    saludos,
    Adolfo

  10. Tras leer la entrada me ha escrito Cayón y me ha dicho QUE EL DURO DE 1871(18-72) ES UNA ERRATA, EN REALIDAD ES UN DURO DE 1871 (18-71).

    Me ha pedido que «corrija urgentemente cualquier alusión a falsedad alguna de la moneda y me lo notifiques por escrito de manera inmediata».

    Esta tarde dedicaré una entrada a informar de la confusión porque ha habido bastante revuelo alrededor.

    saludos,
    Adolfo

  11. Pingback: El duro de 1871 (18-72) « Blog numismático

  12. Gracias por los múltiples enlaces que pones en tus textos. Es una gozada ver las fotos de las monedas de la subasta de Cayón y, efectivamente, apreciar la diferencia en los castillos de las monedas de la Dobla de la Banda de Juan II de Castilla ( estilo gótico en ceca de Avila y románico en la ceca de Burgos). Casi sólo con ver las fotos de las monedas ya se disfruta.

  13. Esto de la subasta de Cayón me parece y perdonenme la expresión «el cuento de la lechera». Una casa de subastas con más de 40 años de experiencia y que publique anuncios como la Errata del duro o que sus resultados en la subastas son mas altos que las de otras, la verdad me hace pensar que en este pais hay poca seriedad y poco respeto por el patrimonio histórico y aqui cada uno cuanto más pueda ganar mejor. En cuanto a los precios bajos de salida, si se quedan bajos, el mismo vendedor los retira porque cuando vé que apenas nadie se anima a pujar por su lote y el precio queda de ganga para el comprador, tienen toda la potestad para retirar el artículo y no venderlo en la subasta, si no vease los precios de la anterior subasta «lot unsold» que significa muchas sin vender, por eso ponen los précios tan bajos.

    1. Hola Francisco,

      A mí me extraña mucho que se puedan retirar las monedas en subasta así como así en una subasta como la de Cayón. Además, las subastas se hacen en vivo por lo que se puede dar el caso de que una pieza no tenga muchas pujas antes de celebrar la subasta y luego en la sala alcance un precio interesante.

  14. Acudí a la subasta de Cayón y considero que son absolutamente profesionales.

    Como detalle curioso: la mayor parte de las piezas se remataron en la sala. Me llamó mucho la atención que en los tiempos de internet los pujadores de la sala superaran casi siempre a las ofertas realizadas electrónicamente.

    Por mi parte estaré atento a próximas subastas de Cayón y, sin duda, acudiré a pujar en la sala.

    Mención especial para las buenorras de Cayón que estaban a la derecha del gestor de la subasta. Sólo por esas buenas vistas ya mereció la pena personarse.

    1. Malaquías, parece que haces honor a tu nombre xD (es un chiste facilón, no te lo tomes a mal).

      Está clarísimo que Cayón son súper profesionales. Yo no acudo a las subastas físicamente porque no me merece la pena desplazarme 600 kilómetros para lo que compro, pero claramente merece la pena si estás en Madrid y tienes tiempo. Además, cuando yo quiero ver a una tía buenorra no tengo más que mirar a mi señora ;)

      saludos,
      Adolfo

      1. Jajajaja malaquias, vaya comentario!
        Yo también estuve en sala, ciertamente se vendieron muchas piezas, aunque algunas piezas claves, con precios de salida desproporcionados no se vendieron. Sobre la profesionalidad del evento, sinceramente creo que sobra la sobriedad del «local» Ritz, y mejorar el cante de las pujas…. Pese a ser hermanos a veces no se entienden! Por cierto, hubo comentario sobre el duro del 1872….
        Sobre las chicas, confirmo la opinión acertada del malaquies!
        Un saludo

  15. Estimado Adolfo:
    He estado de viaje, y no he podido ponerme en contacto contigo, y se me paso el autorizar el que pusieras en tu Blog, los comentarios míos referentes a la Subasta de Cayón, en relación a la subasta de la moneda de 5 Pesetas de AMADEO I, de fecha 1871 estrellas 18-72. Por supuesto lo admito, y te lo agradezco, ya que el trato dispensado por un joven Cayón, hacia un coleccionista de muchos años, no ha sido lo profesional que se merece un cliente, ni en cuanto al trato ni en cuanto a las razones.
    A la vista de tus comentarios y sus exigencias en cuanto a tus aclaraciones en tu Blog, indican y me dan aún mas la razón en mi reclamación que espero este totalmente explicada en mis comentarios, dentro del Foro Imperio Numismático.
    No se si dejar ya el tema o seguir insistiendo para que los coleccionistas vean a lo que están expuestos al no asistir a las salas donde se celebran las subastas.
    Es una vergüenza.
    Un saludo, y por supuesto puedes poner en tu Blog, cualquiera de los comentarios vertidos por mí en cualquier foro.
    Famor.

  16. Pingback: Lo que se puede esperar de las subastas numismáticas « Blog numismático

  17. Adolfo,

    También es casualidad. Hace poco conocí de la existencia de un duro de Amadeo I con la estrella 72. Que pertenece a una impresionante colección del Centenario propiedad de un socio de la Asociación Numismática Sabadell de la cual soy el presidente.

    El duro apareció en un conjunto de duros de un particular, allá por los años 80, y en su momento certificado por un conocido profesional numismático de Barcelona ya fallecido.

    Comentaros también que en el catálogo de los señores Jesus Vico y Fernando P.Segura del año 1987 aparece este duro con la indicación de que sólo se conocen tres ejemplares.

    Un saludo

    1. Hola,

      A mí siempre me mosquea que aparezcan monedas más de 100 años después de haberse acuñado. Me suena raro. Lo digo tanto de esos posibles duros, de los 10 céntimos de la República y de otras. No me encaja.
      Como además no estamos hablando de monedas baratas he llegado a un punto en el que para que me crea su existencia me tienen que proporcionar una amplia bibliografía al respecto y/o documentos históricos que lo avalen. No me sirve con que estén descritos en algunos catálogos.

      Pero que yo de entrada no me crea que ese duro no exista no quiere decir, evidentemente, que el duro no vaya a existir.

      saludos,
      Adolfo

  18. me sorprende la subasta del 30 de enero, quien tiene en su poder un lote que debiera estar destruido, y que entodo caso es del pueblo. es esto legal, quiero suponer que es la hacienda española quien lo saca a subasta.

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