Ya habréis notado que últimamente el blog se actualiza menos de lo que era normal. No es porque estuviera de vacaciones, sino porque llevo con un pico de trabajo desde antes de comenzar el verano; y es lo malo de no ser ni numismático ni periodista profesional: que uno tiene que dar preferencia a aquello que le da de comer.
En los próximos días voy a estar hasta arriba, así que ya descarto la posibilidad de poder escribir otra entrada antes de irme de vacaciones a la Francia bretona. A la vuelta del descanso tengo un viajecillo laboral, así que creo yo que hasta el 10 de septiembre o así no podré volver a ponerme con el blog. Espero, eso sí, cogerlo después con ganas. También quedan a vuestra disposición tanto los comentarios en el blog como mi correo electrónico.
Que disfrutes tus merecidas vacaciones, a la vuelta estaremos (yo, por lo menos) esperando tus nuevas entradas como agua de Mayo.
Un saludo.
Que las disfrutes compañero!
Buenas vacaciones.
Bretaña francesa? No dejes de visitar Dinan y St. Malo, y el imprescindible salto al Mont St. Michel. Y otras tantas joyas por descubrir, incluídos galettes y sidra.
Qué envidia me das…
Hey, qué bien, ahí tienes tus vacaciones. A la Bretaña francesa, ya sabes que ahí está el epicentro de la música celta francesa. Aguardaremos a tus narraciones viajeras. Que lo pases de maravilla. Ahora descansa del trabajo y ésas monedas de las que siempre hablas, es hora de gastárselas en extranjero.
Un abrazo!
Quisiera, pese a que sé por tu Blog que estas de vacaciones, darte las gracias por la cabecera del mismo.
Quizá sea una de las monedas más bellas que he visto, y no porque sea republicana, sino por su sencillez y el material en el que está acuñada, que la hacen «especial» para mí. Después de esta moneda… Franco, el «italiano» como tú bien dices, y el anodino euro.
Espero seguir accediendo a tus páginas pasado el verano.
gracias a todos, ya regresé de las vacaciones y ahora toca ponerse a tope con el trabajo. Ciertamente Bretaña y Normandía son dos regiones para ver, son estupendas.
Krugerrand
St. Malo, Dinan y el Mont San Michel fueron tres de los destinos del viaje. Ciertamente el primero no nos llamó tanto (quizá porque llovía), pero Dinan la vimos como una ciudad muy alegre y San Michel fue, sin ninguna duda, lo mejor del viaje. Absolutamente increíble.
Patricio
no creo que te vaya a dar yo mucha envidia con este viaje… envidia es la que me das tú cada vez que actualizas el blog. Madre mía lo que estáis viendo y viviendo por EEUU.
Manuel
me alegra que te guste esa pieza tanto como a mí. Más allá de las cuestiones políticas, son muchos los que opinamos que los diseños de las monedas durante la Segunda República fueron preciosos, y particularmente esa peseta es muy elegante a la vez que sencilla. Además, con el precio que tiene puede estar en todas las colecciones.
La numismática posterior no es tan vistosa para mí, pero Franco, el Rey y los euros también tienen sus seguidores.